Si hay una línea del Metro de Madrid que siempre está anunciando mejoras y cambios es la línea 6. El pasado 10 de julio se supo que la Comunidad comenzaba a preparar el terreno para instalar los primeros trenes sin conductor en su mapa. Unas obras de renovación del trazado por las que esta línea, la que mayor volumen de viajeros acoge en la capital, deberá permanecer cerrada durante seis meses.
Ahora la compañía metropolitana del transporte público ha anunciado que en los próximos días publicará la licitación de puertas de andén dentro del proceso de automatización de la línea circular, con un importe de 100,7 millones de euros. Se intervendrá en los 70 andenes, que suman 6,4 kilómetros, según informó Europa Press.
Qué son las ‘puertas andén’
Este elemento es imprescindible para hacer de la gris la primera línea del suburbano que introduce la automatización. La Consejería de Vivienda, Transportes e Infraestructuras eligió la L6 por ser la más utilizada de toda la red, con más de 90 millones de desplazamientos registrados en los primeros seis meses del año.
Las puertas automáticas de cierre de andén se instalan en las dársenas de las estaciones para impedir que las personas puedan caerse en la zona de vías, ya que, en la ausencia de un vagón parado, toda la zona permanece cerrada. De esta manera, se garantiza también la entrada al vehículo sin ningún riesgo y de forma ordenada. Serán transparentes para poder ver en todo el momento y ofrecer una mayor sensación de amplitud.
Entre las características de este método, tal y como apunta el portal Magaiz, se encuentra la sincronización con las puertas del propio vagón del convoy para que su apertura sea simultánea, con lo que se impide que las personas caigan en las zonas de vías cuando no pasa el metro. Es un sistema innovador con un nivel de seguridad absoluto, asegurando el bloqueo del acceso no autorizado a los túneles.
Posibilidad de aumentar la regularidad del servicio
Otras de las ventajas de esta innovación es que contará con la posibilidad de aumentar la regularidad del servicio y la capacidad de transporte, según se asegura desde la propia web del Metro. Así pues, se evitarán los retrasos asociados a los usuarios y se incrementará la velocidad de llegada de los convoyes, con una frecuencia de uno cada dos minutos.
Cuáles son las mejoras para el viajero
Estas nuevas instalaciones permitirán que el viajero conozca el estado de cada una de las entradas a través de distintos colores. Esto facilitará que el usuario sepa en cuál debe situarse para realizar el correcto acceso. Asimismo, contarán con serigrafías, barras de seguridad y elementos anti-atrapamiento. También dispone de pantallas LED integradas con comunicaciones de utilidad y una respuesta entendible y visible, que mejora la conexión a la hora de acceder al vagón. Estarán en la parte superior de la infraestructura y ofrecerán información como el tiempo de espera de los siguientes trenes, un plano de Metro o avisos de incidencias.