Antes de Deadpool y Lobezno y todo eso de los multiversos, Hugh Jackman no era el único en encarnar siempre al mismo personaje. Hasta hace relativamente poco solo había un Spider-Man y un Peter Parker, y ese era Tobey Maguire. El actor encarnó al superhéroe arácnido entre 2002 y 2007, y volvería a ponerse las mallas en 2021 cuando el famoso multiverso se puso de por medio en Spider-Man: No Way Home. Pero durante muchos años él fue el único y alucinante, el amigo y vecino, y sus películas están a punto de volver a los cines para recordar quién fue el original.
Sony Pictures ha estrenado este viernes en cines la primera película de Spider-Man, más de 22 años después de su estreno original que dio a conocer a la gran pantalla al que es uno de los superhéroes más icónicos de la historia. Sus difíciles comienzos como estudiante, su amor por Mary Jane Watson (Kirsten Dunst) y amistad con Harry Osborn (James Franco), la muerte del tío Ben (Cliff Robertson) y sus primeros pasos con superpoderes. La película dirigida por Sam Raimi creó escuela a la hora de contar la historia de orígenes de superhéroes y sentó las bases de lo que se convertiría en un género de lo más popular años después ya con la llegada de Marvel.
En cines a lo largo de toda la geografía española, desde A Coruña a Almería, desde Las Palmas a las Islas Baleares, y por supuesto en muchos cines de Madrid, Barcelona o Valencia, volverá a estar disponible esta primera película. Spider-Man no solo narraba los inicios de Peter Parker como superhéroe, sino también su enfrentamiento con uno de sus villanos más clásicos en los cómics, el Duende Verde, interpretado magistralmente por Willem Dafoe. Un villano memorable para una película que, tantos años después, se sigue manteniendo vigente gracias precisamente a la audacia y originalidad de Raimi a la hora de rodar la acción de la película, en una época en la que el CGI y demás efectos especiales no estaban tan en boga como ahora. No obstante, no será la única aventura de Spider-Man que se pueda disfrutar en cines este verano y próximamente.
Calendario arácnido
Porque tras la primera película, el resto de la trilogía de Tobey Maguire y Sam Raimi también irán llegando a los cines. Su secuela, estrenada hace justo 20 años y con otro gran villano como el Doctor Octopus de Alfred Molina, aterrizará en taquilla el próximo 9 de agosto, mientras que la tercera y última entrega hará lo propio la semana siguiente, el viernes 16. Una quincena veraniega para volver a disfrutar en cines de una de las grandes trilogías del cine moderno o para descubrirla por primera vez a quien aun no lo haya hecho.
Pero la cosa no acaba ahí, porque hay telaraña para rato. Sony también lanzará las otras dos sagas con los otros Spider-Man, tanto Andrew Garfield como Tom Holland. Primero será el turno de The Amazing Spider-Man, quien llegará una vez acabado el verano con su primera entrega el 6 de septiembre y su secuela el 13. Las películas de Garfield presentaron a un Spidey aun más juvenil y caótico, aupado por el carisma natural del actor y de su química con la que por entonces era su pareja, Emma Stone, quien daba vida a Gwen Stacy. Los villanos, el Lagarto en la primera entrega y Electro en la segunda, volverían también en Spider-Man: No Way Home para encontrar una segunda oportunidad de una saga que se quedó algo a medias.
Por último, pero no menos importante, en octubre será el turno del último Spider-Man hasta la fecha, el de Tom Holland, quien ya pertenece al Universo Cinematográfico Marvel pero cuyas películas también se estrenaron bajo el sello Columbia Pictures de Sony. La primera parte, Spider-Man: Homecoming, llegará a cines el 27 de septiembre, mientras que Spider-Man: Lejos de casa lo hará el 11 de octubre. La fiesta para poner el broche final y reunir a todos los Spider-Man y sus villanos se producirá el 18 de octubre, con el estreno de Spider-Man: No Way Home. En definitiva, el futuro inmediato tiene color rojo y azul y muchas telarañas, pero de momento este verano será el de ponerse nostálgico y disfrutar de nuevo del primer Spidey.