Joaquín Leguina: “Lo que ocurre en Cataluña es bajarse los pantalones una vez más”

Joaquín Leguina (Villaescusa, 1941) se considera ya lejos del PSOE, o por lo menos asegura que el PSOE de ahora no se identifica con el partido que él lideró en Madrid décadas atrás. Leguina fue dirigente de la Comunidad de Madrid durante 12 años, el único socialista en gobernar en la región, y estuvo 11 años al frente de la Federación Socialista Madrileña (FSM). Sin embargo, sus reiteradas críticas a Pedro Sánchez le costaron la expulsión de la militancia en 2021. Y en abril de este año, dio de nuevo un inesperado salto a un cargo público tras una llamada del PP de Isabel Díaz Ayuso, que aupó al cántabro a la Cámara de Cuentas de la Comunidad de Madrid, el organismo que supervisa el gasto y las contrataciones de la región. A punto de cumplir los 83 años, nunca ha perdido el pulso de la actualidad y atiende ahora a Infobae España para analizar los asuntos de la política nacional. Un tema sobre el que, por cierto, sigue sin morderse la lengua.

Pregunta: La gobernabilidad en Cataluña ha copado los grandes titulares y las negociaciones en Barcelona han levantado las costuras en el PSOE. Hablamos de la ley de amnistía para investir a Sánchez o el reciente acuerdo por la financiación singular en Cataluña para que Salvador Illa sea el próximo ‘president’. Sendos acuerdos han despertado la crítica de los barones socialistas, encabezados por Emiliano García-Page (Castilla La-Mancha) y Javier Lambán (Aragón). En un intento por apagar el fuego interno, este miércoles Sánchez ha defendido que todos los socialistas quieren la investidura de Illa. ¿Cuál es su opinión sobre todo esto?

Respuesta: Lo que ocurre en Cataluña es bajarse los pantalones una vez más. Una cosa es lo que quieras. Yo también quiero que esté Illa y no estén los separatistas, evidentemente, pero no a cualquier precio. Es que realmente lo que están consiguiendo los separatistas, gracias a un sistema electoral que hay que cambiar de arriba abajo, es llevarse el gato al agua. Echar al Estado de Cataluña. Esto va a traer consecuencias muy graves, sobre todo a las comunidades con una renta más baja, como pueden ser Andalucía, Extremadura, etcétera. Me parece que es una auténtica traición y creo sinceramente que no cabe en la Constitución.

Pregunta: Cuando el PSOE expulsó a Nicolás Redondo, el partido aludió a un “reiterado menosprecio a las siglas” por parte del que fue secretario de organización del PSOE, de manera similar a lo que le ocurrió a usted. ¿Está permitido el debate dentro del partido?

Respuesta: Yo creo que, dentro del PSOE como organización, Sánchez se ha cargado todos los instrumentos de debate que cualquier partido democrático debe tener. El Comité Federal ya no funciona. Las reuniones de los secretarios generales no se producen. En fin, es el populismo del liderazgo por el liderazgo. “Yo y las bases”. Es decir, “yo hago lo que me da la gana”. Eso es en lo que se ha convertido el PSOE de la mano de Sánchez.

Pregunta: En su informe del Estado de Derecho, la Unión Europea no quiso entrar a fondo en la cuestión de la ley de amnistía, pero sí quiso pronunciarse sobre el caso de Begoña Gómez, argumentando que debería regularse de algún modo la labor de una figura cercana al presidente del Gobierno. ¿Está de acuerdo con esta posición?

Respuesta: Sí, yo estoy de acuerdo con que se debería regular. En cualquier caso, lo que no parece correcto desde el punto de vista ético y político es que la consorte o el consorte del presidente haga negocios con personas que además luego reclaman dinero al Estado y el Estado se lo da. El caso es ese. No sé si es delito. Yo no voy a entrar ahí porque ni soy juez ni soy quién. Para eso están los jueces. Pero desde el punto de vista político y desde el punto de vista ético, no tiene un pase.

Pregunta: Ahora hay una batalla de querellas, el juez Peinado ha entrado en La Moncloa... ¿La investigación se ha convertido en una causa política en lugar atenerse a la cuestión legal?

Respuesta: Es evidente que cuando está [involucrada] la esposa del presidente del Gobierno y el presidente del Gobierno es llamado a declarar, [el caso] está pisando la política. Pero es que no le queda más remedio al juez si quiere llegar a alguna verdad, que es lo que todo juez debe buscar. En cualquier caso, este es el juez instructor. Los jueces instructores no sentencian. Serán los jueces cuando pase al juzgado, si es que pasa. Entonces, bueno, la Justicia española y la Justicia europea son una Justicia de derechos y del respeto absoluto a los derechos y a la presunción de inocencia. Begoña Gómez tiene los derechos y también la presunción de inocencia, mientras no la condenen.

Pregunta: En una reciente columna de opinión [en The Objective], usted escribía que “los periódicos jugaron un relevante papel en la llegada a España de la democracia. Y durante esta ya larga etapa que hemos vivido desde la muerte de Franco han existido diferencias entre periódicos según la ideología que a cada uno influye, pero nunca como ahora las diferencias han sido tan notables, pues afectan no sólo a matices sino a los hechos mismos que unos niegan y otros denuncian. Para demostrarlo ahí están las andanzas de la esposa del presidente del Gobierno, Begoña Gómez”. ¿Cree que hoy está la política al servicio de los medios o son en realidad los medios los que están al servicio de la política?

Respuesta: Ni la política debe estar al servicio de los medios ni los medios al servicio de la política. Cada uno tendrá su ideología, pero tiene que ser independiente o intentar ser independiente. Un periodista que no es independiente es un periodista maniatado.

Pregunta: Ahora en la política se habla de medios y ‘pseudomedios’. ¿Es positivo para la democracia meterse en estos asuntos?

Respuesta: Yo creo que ahí está la Constitución y están las leyes. No hay que meterse más. Creo que estamos bien así como estamos. Algunos periódicos podrían meter la pata y otros también. Pero una cosa es meter la pata y otra cosa es ser un sectario. El sectarismo a mí no me gusta nada, ni de un lado ni de otro.