El antiguo submarino alemán U17 se ha convertido en un fenómeno este verano al retransmitirse en directo, vía YouTube, su último viaje hacia el Museo Técnico de Sinsheim en la región de Baden-Württemberg, al sur de Alemania. Este buque, de 50 metros de largo, ha estado viajando por más de un año para alcanzar su destino final.
El U17, que sirvió en la Marina alemana entre 1973 y 2010, es objeto de fascinación tanto por su historia como por su imponente tamaño. Con una longitud de 50 metros, un ancho de 4,6 metros y un peso superior a las 350 toneladas, el transporte de este submarino ha requerido una planeación meticulosa y la implementación de medidas especiales.
A pesar de que la distancia entre el Museo Técnico de Speyer y el Museo Técnico de la Automoción y la Tecnología de Sinsheim es de apenas 39 kilómetros -un trayecto que en coche tomaría alrededor de 40 minutos- el traslado del U17 se extiende a lo largo de cuatro semanas debido a sus dimensiones y la complejidad de la operación.
La travesía terrestre del U17 ha tenido un significativo impacto en la región. Las autoridades han tenido que cerrar varios pueblos y carreteras para permitir que el submarino pase. Igualmente, se han impuesto restricciones de tráfico y en algunos casos, incluso la parada de trenes. Estos trastornos temporales han sido necesarios para garantizar la seguridad tanto del equipo de transporte como de los residentes locales.
Transporte fluvial
La ruta del U17 no sólo incluye su desplazamiento terrestre. Parte del trayecto se realiza a través de los ríos Rin y Neckar, lo que agrega un nivel adicional de dificultad. Los responsables del museo explican que debido al tamaño del submarino, éste debe inclinarse 70 grados y navegar por los ríos de lado para pasar bajo varios puentes sobre el Neckar. “Todo el transporte es una tarea delicada. Este transporte pesado de 90 metros de largo y 10 metros de alto maniobramos no sólo bajo puentes profundos, sino también por las calles más estrechas del pintoresco Kraichgau”, detallan.
El diseño del U17 le permitía operar con una tripulación de 23 personas, alcanzando profundidades de hasta 100 metros. Estaba equipado con un motor de tracción eléctrico Siemens de 1.100 kW (1.500 CV) y dos motores diésel MTU de 440 kW (600 CV) cada uno. Estas características le permitían alcanzar una velocidad máxima de 10 nudos (18,52 km/h) en superficie, haciendo del U17 una formidable pieza de ingeniería naval en su época.
La peculiaridad del transporte no ha pasado desapercibida. Gracias a la retransmisión en directo por YouTube, miles de personas han podido seguir de cerca cada etapa del viaje del U17. Este fenómeno en línea ha despertado un renovado interés por la historia naval alemana y ha generado una notable expectación por la llegada del submarino a su destino final.
Una vez que llegue al Museo Técnico de Sinsheim, el U17 descansará finalmente en su nuevo hogar. Allí, los visitantes podrán admirar de cerca esta increíble máquina y aprender más sobre su historia y el contexto en el que operó. No cabe duda de que la llegada del U17 al museo no sólo enriquece la colección, sino que también añade una atracción de gran interés tanto para aficionados a la historia militar como para el público en general.
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