¿Puedo cobrar el Ingreso Mínimo Vital si soy estudiante? Esto dice la Seguridad Social

En España, el Ingreso Mínimo Vital (IMV) es una ayuda económica que pretende evitar la pobreza y la exclusión social en aquellas personas que viven de manera independiente o en una unidad familiar, y que no cuentan con los recursos necesarios para satisfacer sus necesidades esenciales. Actualmente, casi 800.000 hogares perciben esta ayuda, según datos del mes de abril.

Entre los hogares que reciben el IMV, hay estudiantes que por su situación económica se pueden acoger a esta ayuda. Sin embargo, entre los que la perciben, hay alumnos a los que no se les concedía la beca para la matrícula, y que empezaron a temer el no poder costearse el curso escolar por no tener los ingresos suficientes. Teniendo esto en cuenta, el Ministerio de Universidades anunció que aquellos estudiantes a quienes se les haya negado la beca universitaria, pero sean beneficiarios de la prestación del Ingreso Mínimo Vital, estaban exentos de pagar la matrícula del grado en el que estuvieran inscritos. La medida fue aprobada en Consejo de Ministros en mayo de 2020.

Esta propuesta salió adelante tras los problemas socioeconómicos que trajo consigo la pandemia del Covid-19, una medida extraordinaria que tuvo el objetivo de proteger a los hogares que se vieron afectados por estos hechos. Esta situación provocó que muchos estudiantes no pudieran optar a beca porque los ingresos y patrimonio de su unidad familiar en 2019 superaron los límites establecidos, pero su nivel de renta en 2020 disminuyó de manera tan drástica que resultaron beneficiarias del IMV. La concesión de las becas depende del cumplimiento de ciertos requisitos socioeconómicos basados en los niveles de renta y patrimonio del año anterior.

La medida aprobada se diseñó para que actuara como un recurso final en estos casos. De este modo, se evitó el abandono escolar y se aseguró el acceso a la educación superior, garantizando que no se quede atrás ningún estudiante. La iniciativa se aprobó como una disposición transitoria del Ingreso Mínimo Vital, eximiendo del pago de las tasas académicas universitarias.

Además de a los estudiantes, uno de los principales objetivos del IMV es abordar la pobreza infantil. De hecho, según datos del mes de abril, el 67,3% de los hogares que reciben esta ayuda son familias con niños, lo que equivale a 387.227 hogares. De estos, 101.071 son monoparentales. Entre los beneficiarios del IMV, el 41,2% son menores de edad, sumando 711.657 niños, de los cuales 193.646 tienen menos de 5 años.

Según esos datos, el complemento de ayuda para la infancia del IMV ha llegado a 389.700 hogares. Este apoyo económico consiste en 115 euros mensuales por cada niño de 0 a 3 años, 80,5 euros para cada niño entre 3 y 6 años, y 57,5 euros por cada menor de 6 a 18 años. Este complemento, que tiene la misma naturaleza que el IMV, ha tenido una cuantía media de 67 euros por hogar este mes.

El IMV también muestra un claro perfil femenino. En marzo, el 66,65% de las personas que figuran como titulares y el 53,5% de quienes se benefician del programa son mujeres. Además, el 82,3% de los titulares son ciudadanos españoles, y la edad promedio de los titulares es de 45 años.