El euríbor a un año, el indicador más utilizado en España para calcular las hipotecas a interés variable, se ha situado este miércoles en el 3,503%, lo que supone una caída de 15 puntos básicos respecto al mes de junio y de más de 65 comparado con julio del año anterior, cuando se situó en el 4,149%. Con esta nueva bajada, el índice suma su cuarto descenso mensual en 2024 y alcanza el nivel más bajo desde marzo de 2023, lo que anticipa nuevas rebajas en las cuotas para los hipotecados a tipo de interés variable en las próximas revisiones.
Como explica la asociación de consumidores financieros Asufín, los hipotecados verán rebajas muy moderadas en sus cuotas, que “apenas restarán 38,26 euros al mes, para quienes revisen en el mes de diciembre, pese a soportar una subida de cuota total de 173,26 euros, desde 2021″. Y es que, las hipotecas vinculadas a un interés variable siguen enfrentando, a pesar de la caída del euríbor, un aumento del 58 % por cada 100.000 euros prestados, en comparación con la época en que el indicador era negativo.
De acuerdo con los cálculos de la organización, en julio de 2021, cuando el euríbor estaba en -0,49 %, la cuota mensual de una hipoteca promedio era de 355,06 euros. Sin embargo, ese mismo mes de 2024, con un euríbor del 3,5 %, esa misma cuota asciende a 555,83 euros, lo que supone un aumento de 200 euros. Por ello, Asufin sigue exigiendo a los bancos que sean flexibles en las negociaciones con los clientes afectados que quieran modificar sus condiciones.
La bajada de tipos no acompaña
El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido este jueves mantener los tipos de interés en el 4,25 % a la espera de tener más datos que refuercen su confianza de que la inflación llegará a su objetivo del 2%. La anterior bajada se produjo el pasado mes de junio, cuando la institución cumplió con las previsiones y bajó los tres tipos de interés oficiales 25 puntos básicos.
Esta decisión llega un día después de que Eurostat confirmase que la inflación en la eurozona se desaceleró en junio, registrando una disminución de una décima comparado con el mes anterior, hasta alcanzar una tasa interanual del 2,5 %, retomando así la senda descendente interrumpida en mayo. No obstante, la inflación subyacente, que excluye energía y alimentos frescos debido a su volatilidad, se mantuvo estable en el 2,9 %, mientras que el precio de los servicios continuó siendo la categoría con mayor inflación, situándose en el 4,1 %.
Según el portal de intermediación financiera Gibobs.com, la disminución en junio benefició al 45 % de las hipotecas variables en España y contribuyó a la revitalización de un mercado “profundamente impactado por la inflación”. Además, esto representó un incremento del 1% en el valor promedio de la propiedad, alcanzando los 229.854 euros. Esto implica un aumento de 2.228 euros en el precio medio de la vivienda en España en comparación con el primer trimestre del año.
*Con información de Efe