Don Juan Carlos ha vuelto a nuestro país y ha irrumpido en la agenda real con su inesperada visita a Sanxenxo este 10 de julio. A lo largo de estos días, ha asistido a las regatas mientras que los reyes se encontraban en los Premios Princesa de Girona y días después Leonor cumplía su primer viaje al extranjero en solitario al acudir a Portugal.
La reaparición de Juan Carlos I ha provocado un gran revuelo, en especial tras el emotivo reencuentro con su hija, la infanta Elena, en el puerto que lleva el nombre del monarca. Elena llegó al puerto el 12 de julio, donde se encontró con su padre sin que este abandonara su yate, el ‘Bribón’.
El contexto de estas maniobras del rey emérito en su propia embarcación se sitúa en la costa gallega, un punto habitual de la Familia Real, donde las regatas han sido una de sus actividades favoritas desde que se levantó “la prohibición de su entrada al país”. En lo que va del año, Juan Carlos I ha visitado España en seis ocasiones: cuatro por motivo de las regatas y las otras dos debido a la boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo y Moreno, y al fallecimiento de su sobrino Fernando Gómez-Acebo.
Durante su estancia en el ‘Bribón’, el emérito se ha mostrado visiblemente emocionado al ver a su hija. Donde se saludaron en señal de agradecimiento por su visita, y al bajar del velero, ella dedicó palabras de agradecimiento a la tripulación antes de fundirse en un cálido abrazo con su padre.
La presencia de Juan Carlos I en Sanxenxo también ha incluido momentos de interacción con la prensa. El rey emérito, mientras saludaba desde lejos, fue fotografiado entrando en un coche junto a Elena para pasar más tiempo juntos, un lujo poco usual desde que él fijó su residencia en Abu Dabi hace casi cuatro años.
Leonor comienza su camino hacia el reinado
El primer viaje en solitario de Leonor, de 18 años, a Portugal ha sido otro de los eventos que acaparan la atención pública en esta semana clave para la Familia Real. Este movimiento de la joven princesa marca un paso significativo en su formación y comienza a perfilar su futuro rol dentro de la monarquía. Los Premios Princesa de Girona, celebrados días antes, fueron otro importante evento de la familia, subrayando la preocupación por el progreso y compromiso de las nuevas generaciones de nuestro país.
Acompañada del ministro de Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, aterrizó en el aeropuerto militar de Figo Maduro, donde fue recibida por el Presidente de la República de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa. Una vez en Lisboa, la princesa de Asturias acudió al Monasterio de los Jerónimos, donde disfrutó de una ofrenda floral en la tumba del poeta Luis de Camões.
Después, se trasladó a la Torre de Belém junto con Rebelo de Sousa y tras este, se le hizo la entrega de la Gran Cruz de la Orden de Cristo. Finalmente, Leonor asistió a un almuerzo junto al presidente, donde alabaron las relaciones entre Portugal y España, y acudió al Oceanario de Lisboa, acompañada por la bióloga marina, Marina Duarte.