La inflación se situó en el 3,4% en mayo, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), dos décimas por debajo del dato correspondiente al mes de mayo. Esta reducción está directamente relacionada con la bajada de los precios de los carburantes, además de reflejar una buena evolución de los precios de los alimentos. Así lo demuestra el IPC de los alimentos, que se reduce en dos décimas hasta el 4,2%, su menor dato desde diciembre de 2021.
En cuanto a la inflación subyacente, esta se mantuvo estable en junio, al situarse en el 3%, lo que evidencia la estabilidad de los últimos tres meses. Fuentes del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa han valorado positivamente los datos, señalando que “siguen reflejando la capacidad de la economía española de compatibilizar el mayor crecimiento económico entre los principales países de la zona euro con una moderación de los precios y el mantenimiento de las medidas para seguir reduciendo los precios de los alimentos”.
En cuanto a los grupos que más destacaron por su influencia en el descenso de la tasa anual fueron el transporte y la alimentación. El transporte, que situó su variación anual en el 2,7%, muestra un descenso de más de un punto porcentual con respecto al mes previo, debido principalmente a los precios de los carburantes, que bajaron a la subida en el mismo mes de 2023. La inflación de los alimentos, por su parte, disminuyó en dos décimas, y se situó en el 4,2%, debido principalmente al descenso de los precios de aceites y grasas, frente a la subida en junio del año anterior.
Entre los grupos con inflación positiva destacó el ocio y la cultura, cuya tasa anual aumentó dos décimas, hasta el 3,0%. Este incremento se debió a las subidas de los precios de los paquetes turísticos, mayores que en junio de 2023.
Inflación por comunidades autónomas
El IPC registró tasas anuales positivas en todas las comunidades autónomas en junio. Galicia presentó la más elevada (3,7%) y Cantabria y Canarias las más bajas (3,1% ambas).
La inflación subyacente persiste por el efecto base
La razón del estancamiento de la inflación subyacente está relacionada con el efecto base, un sesgo estadístico que ocurre cuando se comparan datos con grandes descensos del año anterior, lo que dificulta mantener una tendencia a la baja. Aunque este fenómeno puede explicar en parte el estancamiento, los datos mensuales, que reflejan lo ocurrido en los últimos 30 días y permiten eliminar el efecto base, también muestran aumentos. En concreto, se ha observado un incremento de medio punto en el último mes.
Este aumento mensual indica que las presiones inflacionarias persisten, siendo más intensas en España en comparación con el conjunto de Europa. Esto se debe en gran medida al mayor crecimiento de la economía española, que genera una demanda adicional sobre bienes y servicios y, por ende, una mayor presión sobre los precios. Otros factores que contribuyen a esta situación incluyen la recuperación del mercado laboral, la reactivación de sectores impactados por la pandemia y las tensiones en las cadenas de suministro globales.