Los robos de herencias más dramáticos: de la hermana que vació la cuenta del fallecido al abogado que se apropió de medio millón

Cobrar una herencia en España puede convertirse en un problema por diferentes motivos: las deudas del fallecido que toca pagar a los herederos, el conflicto entre los descendientes por el reparto, el pago del Impuesto de Sucesiones e incluso abogados o familiares que estafan a los hijos u otros sucesores.

La lucha por una buena cantidad de dinero o bienes ha llevado a muchas personas a saltarse la ley en busca de un mayor botín. Sin embargo, unos cuantos han sido llevados ante la Justicia, recibiendo condenas de cárcel y multas muy elevadas.

En este artículo hacemos un repaso a los casos más sonados de tribunales regionales y audiencias provinciales. Las sentencias y sus historias sobre herencias no dejarán a nadie indiferente.

La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ratificó en octubre de 2021 la condena impuesta por la Audiencia Provincial de Zamora a una mujer acusada de apropiación indebida del dinero de su hermano fallecido. La sentencia original, confirmada en esa fecha, incluye una pena de dos años de prisión y una multa de ocho meses con una cuota diaria de seis euros.

La acusada, cotitular de la cuenta bancaria junto a su hermano, realizó varios reintegros inmediatamente después de su muerte. Durante el día del fallecimiento, extrajo 13.000 euros en dos movimientos y al día siguiente retiró otros 40.000 euros. Posteriormente, efectuó dos retiradas más, sumando 4.850 euros una vez que la cuenta recibió ingresos adicionales.

El tribunal consideró probado que la mujer, plenamente consciente de que los fondos pertenecían exclusivamente a su hermano, actuó con la intención de evitar que el hijo de este heredara el dinero. La sentencia subraya que el fallecido no había dejado constancia alguna, de forma pública o privada, de querer desheredar a su hijo, quien fue reconocido como heredero legítimo.

La Audiencia de Zamora también había ordenado a la sentenciada devolver la cuantía de la que se apropió, 57.850 euros, a los herederos del fallecido. Además de las condenas económicas y la pena de prisión, la resolución refleja la intención deliberada de privar al hijo del fallecido de cualquier parte de la herencia.

Luis G. H., abogado en ejercicio, fue condenado en enero de 2020 a dos años de prisión por un delito de apropiación indebida, según resolvió la Sección 23 de la Audiencia Provincial de Madrid. La sentencia establece que Luis G. H. recibió 63.832 euros en metálico y un vehículo valorado en 1.450 euros para gestionar y liquidar la testamentaría de Ana F. M., fallecida el 6 de julio de 2013.

El hijo de la fallecida, Juan Manuel R. F., confió al letrado los fondos provenientes del caudal hereditario y la venta del vehículo. Sin embargo, el tribunal concluyó que Luis G. H. se apropió de dicha suma y del importe obtenido por la venta del automóvil, incumpliendo sus responsabilidades profesionales.

El tribunal consideró probada la intención del abogado de enriquecerse ilícitamente en lugar de ejecutar su función de administrar y liquidar los bienes de la fallecida, como era su deber.

La Audiencia Provincial de Zaragoza sentenció en enero de 2017 a Cristina R.P., una abogada, a tres años de prisión por delitos de apropiación indebida, estafa procesal en grado de tentativa y falsedad en documento mercantil. El fallo, emitido por la Sección VI, también estableció una indemnización de ciento veintinueve mil quinientos euros (129.500 €), más intereses legales, a una menor de edad perjudicada por los actos de la acusada.

Las víctimas, una madre y su hija menor de edad, fueron defraudadas por Cristina R.P., quien incurrió en la apropiación indebida y presentó documentos falsificados en un intento de estafa procesal. El tribunal determinó que estas acciones causaron un daño significativo a las afectadas, especialmente a la menor, quien recibirá la compensación monetaria correspondiente.

En contraste, el esposo de la condenada, Jesús A. de A., quien también se enfrentaba a similares acusaciones de apropiación indebida, estafa procesal y falsedad en documento mercantil, fue absuelto de todos los cargos. Esta resolución significa que no se le imputaron responsabilidades penales en relación con este caso específico.

Pedro G. R., abogado en ejercicio, fue condenado en septiembre de 2023 por la Sección 23 de la Audiencia Provincial de Madrid. La sentencia lo responsabiliza de un delito de apropiación indebida, ordenando seis años de prisión y una multa de tres meses con una cuota diaria de diez euros.

Resultó acreditado durante el juicio que el condenado, en su rol de asesor legal, se apropió de una suma de 617.263,11 euros perteneciente a Rosa Silvia C. G., en el contexto de una herencia familiar. Además de la pena de cárcel, el condenado tuvo que indemnizar a la víctima con dicha cantidad, más los intereses legales desde la fecha de los hechos.

La procedencia de la herencia proviene de Alberto C., cuyo albacea, Francisco Jesús C. M., contrató a Pedro G. R. para preparar el inventario y liquidar la herencia. Los bienes inventariados ascendían a 2.188.563,33 euros. Se esperaba que Rosa Silvia C. G., nombrada heredera universal, recibiera 1.669.360,88 euros tras deducir la legítima de los otros herederos y el pasivo de la herencia.

La querellante desconocía las operaciones realizadas, habiendo firmado un documento preparado por el acusado sin tener pleno conocimiento de las transacciones. Más tarde, descubrió que el valor de su herencia había sido aceptado y gestionado sin su autorización.

Las operaciones llevadas a cabo por Pedro G. R. y Francisco Jesús C. M. incluyeron acciones como la liquidación del Impuesto de Sucesiones y la disposición de bienes heredados sin el consentimiento de Rosa Silvia C. G. Estas actividades permitieron que el albacea actuara sin restricciones sobre los bienes de la herencia.