El apetito de los extranjeros por la vivienda de la costa española dispara los precios y esquilma la oferta en las islas

El metro cuadrado en los municipios del litoral sube un 5,7% el último año hasta pagarse a 1.740 euros el metro cuadrado y el alquiler se encarece un 9%

Guardar
Castillo de Dalt Vila, en Ibiza (Shutterstock).
Castillo de Dalt Vila, en Ibiza (Shutterstock).

Comprar una vivienda en la costa española sigue siendo una aspiración para muchas familias nacionales y extranjeras, a pesar de que los precios no cesan de subir, el último año lo han hecho un 5,7% de media, situando el metro cuadrado en los 1.740 euros. En cuanto al segmento específico de vivienda vacacional, excluido el residencial, se encareció un 3,9% en el primer trimestre del año, con el metro cuadrado en los 2.650 euros.

“Este crecimiento de precio de la vivienda vacacional es superior al 3,3% nacional, pero inferior al 5,7% de la vivienda general en la costa, lo que apunta hacia un incremento de los tensionamientos en el mercado de primera residencia en un contexto de producto residencial cada vez menos diferenciado que permite su traspaso al vacacional, ya sea en compraventa o alquiler”, explica Cristina Arias, directora del Servicio de Estudios de Tinsa.

La mayor subida de precios de la primera y segunda vivienda en la costa durante el primer trimestre del año se ha producido en Málaga, con una escalada del 9,3%; seguida por las Islas Baleares, con un 8,8%, y Alicante, con el 7,2%. A pesar de esta remontada, los analistas descartan que se esté produciendo una sobrevaloración generalizada de la vivienda de costa. Las únicas excepciones serían localidades concretas en las islas y en la costa mediterránea.

Precio de la vivienda en municipios costeros.
Precio de la vivienda en municipios costeros.

“Solo en Ibiza se detecta un sobrecalentamiento y se describe una situación de tensión extrema en los precios, con una demanda cada vez más concentrada en el segmento residencial de lujo”, explica Andrea de la Hoz, consultora senior del Servicio de Estudios de Tinsa.

Ello hace que los tres municipios de la costa española donde el valor medio residencial es más elevado se encuentran en Ibiza, son San José de sa Talaia, donde el metro cuadrado se paga ya a 4.191 euros; Santa Eulalia des Riu, con 4.151 euros, e Ibiza capital, con 3.656 euros.

Viviendas irresistibles para los extranjeros

Unos de los responsables del encarecimiento de la vivienda en los municipios del litoral español son los extranjeros y su ‘hambre’ por el inmobiliario de nuestras costas. Protagonizaron el 25% de las compraventas que se produjeron el año pasado en estas zonas, y abarcaron el 15,44% de las operaciones realizadas en todo el país.

“Esta cifra, la segunda más alta de la serie histórica y sólo ligeramente por detrás del tercer trimestre de 2022, con un 15,92%, demuestra el gran atractivo que el mercado inmobiliario español sigue teniendo dentro del entorno europeo, pues ante el retroceso en el número de operaciones, el inversor extranjero aparece ahora como un agente dinamizador clave”, explica Ferran Font, director de Estudios y portavoz de pisos.com.

Los mayores ‘fans’ de la costa española a la hora de adquirir una vivienda son los británicos, franceses y alemanes, que acapararon la mayor parte de las operaciones en el último año. No obstante, los analistas han detectado como los nacionales de Italia, Bélgica e Irlanda han aumentado su interés por nuestro inmobiliario, junto a ucranianos, polacos, lituanos, rusos, chinos, estadounidenses y argentinos.

Dónde compran vivienda los extranjeros en la costa española
Dónde compran vivienda los extranjeros en la costa española

“Si hay un perfil que siempre ha destacado en España, ese es el comprador británico, que ve nuestro territorio con gran interés, no sólo por los precios de las viviendas, sino también por el clima y la calidad de vida, haciendo que incluso a día de hoy, cuando la demanda está más diversificada que nunca, siga ocupando el primer puesto en el ranking”, reconoce Font.

Los constructores y promotores se han percatado de la querencia de los foráneos por el inmobiliario español y se han puesto manos a la obra: “En vivienda nueva se pueden encontrar promociones completas destinadas a una nacionalidad concreta, comercializadas en los países de origen e incluso promotoras extranjeras orientadas al perfil de demanda de su país de origen”, explica de la Hoz.

En Mallorca no hay viviendas que comprar

La subida de precios de la vivienda en la costa el año pasado redujo un 11,2% el volumen de compraventas tanto de primera como de segunda residencia hasta las 257.660. Esta desaceleración se notó más en las islas, que después de que en 2022 lideraban el crecimiento, en 2023 sufrieron la mayor contracción, con una caída del 16,7% anual, debido a la escasez de oferta y al fuerte tensionamiento de los precios, que en algunas zonas ya alcanzan los máximos de la burbuja de 2007.

En cuanto a la vivienda vacacional, solo en zonas de Mallorca se comienzan a observar caídas en las compraventas: “Se detecta una limitación de producto generalizada ante una demanda de segunda residencia muy elevada. Se considera que las compraventas no son mayores porque no hay más vivienda a la venta. Existe demanda insatisfecha tanto de obra nueva como de vivienda usada”, explica Andrea de la Hoz.

La costa norte desbanca a la del sur

Entre las localidades de costa que más demandan ahora los compradores destacan las del norte, que han conseguido desbancar a las del sur debido al cambio climático que ha generado una subida de las temperaturas en el sur de España.

La Playa de Lastres, ubicada en la costa de Asturias, es la zona más buscada de España este año para comprar una casa, según datos de Fotocasa, seguida por la Playa de El Palmar, en Cádiz, y la Playa de Mogro, en Cantabria.

“El norte de España, cada vez con veranos más cálidos, se está convirtiendo en una gran alternativa a las altas temperaturas del sur de la península. Además, las nuevas conexiones de tren de alta velocidad hacia el norte del país están atrayendo a más compradores de segunda residencia”, apunta María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa.

En su opinión, vivir cerca de la playa “se ha convertido en algo muy codiciado, y la costa de España sigue siendo la protagonista, tanto para nacionales como para extranjeros, al ser una excelente opción para evitar los veranos excesivamente calurosos”.

El apetito de los extranjeros por la vivienda española dispara los precios en las ciudades donde se concentra su demanda.

Alquileres un 9% más altos

Al calor de la subida de los precios de compra también se han encarecido un 8,9% interanual los alquileres vacacionales en las zonas de costa durante el primer trimestre del año, según recoge el Índice de Precios de Apartamentos Turísticos en Alquiler (IPAP) del INE.

Esta remontada es algo inferior al impulso de doble dígito registrado en el mismo periodo de 2022 y 2023, pero “aun así es intenso”, reconocen desde Tinsa. Señalan que en casi tres cuartas partes del litoral se reflejan aumentos de entre el 5% y 30% de las rentas.

Guardar