El Informe Europeo de Sistemas de Retención Infantil (SRI), elaborado por el Automóvil Club de Alemania (ADAC) y presentado en España por la Fundación RACE, analiza las características de más de una veintena de sillitas para llevar a los niños en los coches. El estudio ha examinado su seguridad, facilidad de uso, acabados, ergonomía y el contenido de las sustancias con las que han fabricado. De las 24 sillitas analizadas, la gran mayoría obtiene resultados positivos: 15 son consideradas “buenas” y otras siete “aceptables”. Sólo suspenden dos, que han recibido la calificación de “malas”, “a causa de la presencia de sustancias nocivas en su composición”, señala el informe.
En el apartado de seguridad, “en el que se valora la protección que el SRI ofrece en impactos frontales y laterales” -explica el documento-, la mayoría obtiene resultados positivos: cinco modelos reciben calificación “muy buena’ -todas ellas en la categoría para niños de hasta 1,5 años-, 11 son “buenas” y siete “aceptables”. Sólo una es valorada como “mala” debido al “riesgo alto en colisiones frontales y medio en laterales” (esta sillita coincide con una de las dos que también suspenden por la composición de sus materiales). La protección frente a colisiones laterales es crucial para minimizar el riesgo de lesiones graves a los menores.
Las sillitas para niños que no aprueban son: el modelo Peg Perego Viaggio Twist + Base Twist, criticado tanto por su seguridad como por la presencia de sustancias nocivas en su composición; y el modelo Silver Cross Discover i-Size, señalado también por sus materiales.
Recomendaciones para los padres
A la hora de adquirir la silla para el coche, la DGT y otras organizaciones de seguridad vial ofrecen una serie de recomendaciones para los padres:
Verificar la homologación. Asegurarse de que las sillas de coche cumplan con las normativas de seguridad R44 o R129. Esta última es la más estricta y moderna en términos de requisitos de seguridad, y estableció el estándar europeo i-Size. La norma anterior se basaba en el peso del niño, mientras que esta calcula las características que deben tener las sillitas a partir de la estatura, pues es un factor que permite medir mejor la seguridad.
Instalación correcta. Seguir siempre las instrucciones del fabricante para la instalación de la silla. Un sistema mal instalado puede reducir drásticamente su efectividad en caso de accidente.
Evitar el mercado de segunda mano. Las sillas de segunda mano pueden tener daños no visibles que comprometan su integridad estructural y la seguridad del niño.
Estas medidas buscan no solo mejorar la seguridad de los niños en los vehículos, sino también garantizar que todos los sistemas de retención infantil en el mercado cumplan con los más altos estándares de calidad y seguridad. En respuesta a estos problemas, la DGT ha intensificado sus campañas de concienciación y control sobre el uso correcto de los sistemas de retención infantil. Además, se ha propuesto una reducción del IVA para estos productos esenciales en España, similar a la aplicada en otros países europeos, para hacerlos más accesibles a todas las familias.