La DANA que ha obligado a sacar de nuevo paraguas y chaquetas en buena parte del país se despide esta semana de la península. Su fin coincidirá con el solsticio de verano, que empieza este viernes. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) explicaba a través de sus redes sociales que el lunes habría chubascos en Galicia y Asturias, el martes se extenderán al noroeste peninsular, miércoles a la mitad oeste y el jueves mitad norte y Baleares, donde podrán ser intensos y acompañados de tormenta. Sin embargo, el viernes y el fin de semana el cielo volverá a la calma.
El principio de la semana ha estado marcado por un descenso térmico, pero para cuado esta acabe, las temperaturas habrán vuelto a ser las habituales para esta época del año. La Aemet detalla que a partir del viernes habrá una “subida notable que continuará el sábado, para el domingo ya ser propias de pleno verano”. “A finales de esta semana y comienzos de la que viene, el calor será intenso en muchas zonas”, han avisado desde la Aemet.
A las puertas de un verano muy cálido
Los meses de julio, agosto y septiembre de 2024 serán muy probablemente más cálidos de lo normal con lluvias que también podrían ser más escasas de lo habitual, según según el avance del informe climático que ha presentado la Aemet este miércoles.
Durante la rueda de prensa, Rubén del Campo, portavoz de Aemet, ha explicado que este verano podría situarse entre el 20% de los más cálidos registrados en el tercio norte peninsular y las islas Canarias más orientales. Concretamente, hay entre un 50 y un 70% de posibilidades de que así sea, aunque ha matizado que en el resto de España esta probabilidad es menor.
En este próximo trimestre se esperan lluvias inferiores a las normales, sobre todo en el norte y en puntos del interior de la Península. Aún así, ha pedido “cautela” en esta predicción en comparación con la de la temperatura, “que parece más clara”.
La décima primavera más cálida desde que hay registros
El informe climático, que también hace balance de la primavera, detalla que el período comprendido entre el 1 de marzo y el 31 de mayo fue cálido en todo el país, con una temperatura media de 13,1 ºC, que supone 0,7 ºC más que el promedio del período de referencia 1991-2020.
La agencia califica el mes de marzo como cálido, el de abril como muy cálido y el de mayo como normal, a pesar de que los episodios de temperaturas superiores a las normales fueron frecuentes. A finales de mayo se llegaron a alcanzar los 39 grados y se batieron récords absolutos de temperatura para la primavera, como en Tenerife sur o Tortosa. Hubo también varios episodios fríos destacados, como el de comienzos de marzo, en el que hubo heladas importantes. En capitales de provincia como Burgos o Soria se llegó a -4 ºC..
Durante estos meses, se registraron temperaturas cerca de un grado por encima de la media en Andalucía, el sureste de Extremadura, la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha, Murcia y Comunidad Valenciana. También se registraron estas anomalías en La Rioja, el centro y sur de Aragón, Cataluña y en puntos del Cantábrico. Sin embargo, fue Canarias la región que llegó a registrar marcas entre uno y dos grados por encima de lo normal.