Los ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea han dado el visto bueno este lunes a la Ley de Restauración de la Naturaleza, cuto objetivo es recuperar al menos el 20% de las zonas terrestres y marinas para 2030. La norma, que llevaba meses estancada en el Consejo, ha salido finalmente adelante con el voto a favor de 20 Estados miembro, la abstención de Bélgica y el rechazo de Finlandia, Italia, Hungría, Países Bajos, Polonia y Suecia. Fue este mismo domingo cuando Austria cambió su posición y decidió respaldarla.
“Esta es la decisión correcta y lo que los ciudadanos, los científicos y la industria seguían pidiendo. Todavía estamos en camino de revertir la pérdida de biodiversidad, comencemos ahora a trabajar juntos y demostremos que la UE sigue liderando el camino”, ha destacado el comisario europeo de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevicius.
Organizaciones como Amigos de la Tierra, ClientEarth, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF han aplaudido la aprobación de esta norma, ya que “responde a las demandas de más de un millón de ciudadanos, empresas, científicos y organizaciones ecologistas y sociales”. “Este marco normativo representa una oportunidad histórica para devolver la naturaleza a Europa, en un momento crítico en que el continente enfrenta inundaciones, sequías e incendios”, señalan los grupos en un comunicado, al tiempo que destacan que “es un claro mensaje de que Europa puede y debe comprometerse en la lucha por la supervivencia del planeta”
Además de la recuperación del 20% de los ecosistemas terrestres y marinos de la UE en los próximos seis años, la norma también contempla la restauración total de los ecosistemas degradados para 2050. Asimismo, explican las organizaciones en el comunicado, plantea la eliminación de barreras y la mejora de la conectividad hidráulica en al menos 25.000 kilómetros de ríos, la reversión del declive de las poblaciones y diversidad de polinizadores, y la restauración de ecosistemas forestales y urbanos.
El reglamento también incorpora “objetivos de mejora en diversos indicadores ecológicos de los ecosistemas agrícolas y medidas para promover la restauración marina mediante una gestión pesquera adecuada”.
Implantación en España
Las organizaciones ambientales consideran que la aprobación de este reglamento debe traducirse en España en un plan nacional de restauración y en estrategias regionales que “aseguren el cumplimiento de las obligaciones” derivadas del mismo. “Es fundamental que estos documentos estratégicos se desarrollen con la máxima participación pública, incluyendo a todos los sectores, para evitar la desinformación y las ideas falsas que casi truncaron esta importante norma”, indican, al tiempo que sostienen que con esta ratificación “se da un paso crucial hacia un futuro más seguro, sostenible y saludable para todas las personas en Europa”.
Por todo ello, las organizaciones hacen un llamamiento a todos los actores, desde las administraciones hasta la ciudadanía, a trabajar en la implementación de la norma.