Un español que vivió dos años en Irlanda explica lo que más echó de menos de España: “Tenemos una sanidad histórica”

Puedes ser más o menos patriota, pero cuando uno se va a vivir al extranjero, es inevitable no echar de menos España. Son muchas las razones, y una de ellas -aunque todavía no funcione todo lo bien que debería- es el sistema de sanidad pública. Es de las más destacadas del mundo y los españoles que se van fuera y pueden comparar son más conscientes de ello. Nacho Barrueco, quien llevaba dos años sin pisar España, ha compartido en TikTok las cosas de las que más se acuerda de su país, y la facilidad para ir al médico es una de ellas.

“Llevo dos días de médicos. Inviable hacer esto en Irlanda. Cuando digo inviable es que es inviable. Aquí habré visitado cinco médicos en dos días”, asegura en un vídeo. Y es que en Irlanda no hay. Sólo asistencia gratuita para personas que tienen Medical Card, y no es fácil acceder a ella, los requisitos son muy estrictos: se basan en el nivel de ingresos (inferiores a los que se consiguen con prácticamente cualquier trabajo) y en demostrar que eres lo que denominan un ordinarily resident (que has vivido continuamente en el país por al menos 1 año y tienes intención de quedarte). En comparación, Nacho asegura que en España “tenemos una sanidad histórica”.

Otra de las cuestiones que destaca en su vídeo es el precio del café. Cualquier persona que haya salido de España habrá comprobado que no es tan sencillo entrar en cualquier bar y pedir un café como lo entendemos aquí. El cortado no existe y por menos de dos euros no vas a encontrar nada. “No me acordaba de que en España era tan barato”, reconoce. “Estoy acostumbrado a gastarme cuatro euros por un capuchino y aquí te cuesta un euro, 0,75 vi el otro día en el Mercadona”, dice.

El clima es, por excelencia, la gran ventaja de España y el motivo por el que cada verano tanto las islas como la península se llenan de británicos. “Salir a dar un paseo, disfrutar del sol… Yo sabía que condicionaba mucho el clima en Irlanda, pero no sabía que iba a echar tanto de menos el tiempo que tenemos en España. En Irlanda las temperaturas son suaves durante todo el año. En invierno, raramente caen por debajo de los 0°C, con medias alrededor de 5°C a 8°C. En verano, las temperaturas alcanzan entre 15°C y 20°C, y muy pocas veces superan los 25°C. El problema es que el clima es muy lluvioso, hay precipitaciones todo el año y fuertes vientos.

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Una de las cosas a las que estamos acostumbrados en España es a que las tiendas cierren tarde. En algunas ciudades, a las nueve de la noche aún puedes comprarte unos zapatos. Sin embargo, no es así en Europa ni en Irlanda en concreto. “Estaba acostumbrado a que en Irlanda todo estuviera cerrado a las seis. Cuando te digo todo es todo, menos los supermercados y ahora en España son las nueve de la noche y yo estoy yendo a mi centro comercial de confianza”, cuenta el TikToker, que justo va en el coche para irse de compras.

Y, finalmente, lo que más le gusta a todos los extranjeros que visitan nuestro país, y no es la paella ni la sangría: las persianas. “Dos años sin verlas, esto es histórico”, asegura Nacho, que se dispone a echarse una buena siesta al estilo español. En muchos países, debido al clima o a cuestiones culturales, no usan este elemento en las casas, aunque también el diseño y estilo arquitectónico pueden influir en su ausencia. Sin embargo, en España, no estamos acostumbrados a vivir sin ellas.