El nuevo Parlamento Europeo contará con 61 escaños elegidos en los comicios realizados en España para las elecciones europeas. Nuestro país es el cuarto en la lista de más diputados y en los últimos años se ha mostrado como un territorio a tener muy en cuenta en clave internacional. Es por eso que la victoria del Partido Popular, cuya lista encabezaba la exministra catalana Dolors Monserrat, se ha vivido como una importantísima victoria en Génova, lo opuesto en el caso de aquellas formaciones que no han logrado obtener los resultados esperados. Sin embargo, aunque la victoria del PP se ha visto reflejada en los resultados de muchas comunidades autónomas, en otras no ha sido la fuerza más votada, de modo que esta jornada electoral puede servir como ‘termómetro’ de qué influencia tiene cada partido en los distintos territorios del Estado español.
En efecto, en el mapa autonómico se puede apreciar que el vencedor de las elecciones europeas de este domingo ha sido el Partido Popular. La formación liderada por Alberto Núñez Feijóo ha sido la que más papeletas ha recibido en 13 de las 17 comunidades autónomas, además de en Ceuta y en Melilla. Lo ha hecho, además, superando el 40% de los votos en ocho de estas administraciones: Madrid (40,7%), Extremadura (41,4%), Castilla-La Mancha (41,4%), Cantabria (42,7%), Murcia (42,8%), Galicia (43,6%), Castilla y León (44,5%) y La Rioja (44,7%). Además, ha conseguido situarse por delante del PSOE en dos comunidades en las que los socialistas mantienen el Gobierno autonómico: Asturias y Castilla-La Mancha.
Malas noticias, entonces, para el Partido Socialista Obrero Español, que ha pasado de ser mayoritaria en 2019 en 15 comunidades y en Ceuta a solo ganar en tres: Navarra, con el 28,8% de los votos, Canarias, con el 30,4% y Cataluña, con el 30,6%. Salvo en esta última, además de en el País Vasco y Navarra, han empeorado sus resultados respecto a 2019. Por otro lado, también hay que decir que sus mejores cifras se dieron en las comunidades donde no fue la fuerza más votada, siendo el caso de Extremadura (36,6%) y Asturias (35,1%).
Los resultados de los partidos nacionalistas
Especialmente significativos han sido los resultados del País Vasco. Por primera vez en unos comicios europeos, el Partido Nacionalista Vasco (PNV) ha quedado en tercera posición, por detrás de EH Bildu y el PSE-EE -el partido socialista de esta comunidad autónoma-. No obstante los nacionalistas han asegurado haber cumplido “el primer objetivo” de estas elecciones, que no era otro que el de mantener el escaño en el Parlamento Europeo, que irá para la política Oihane Agirregoitia, también en representación de Coalición Canaria, El Pi-Proposta -Baleares-, Agrupación Atarrabia y Geroa Socialverdes -Navarra-. Cabe recordar que fue con estos partidos con quienes el PNV forjó, en 2019, la Coalición por una Europa Solidaria (CEUS).
Por otra parte, también en Cataluña se ha confirmado una dinámica que ya venía anunciada por las elecciones autonómicas del 12 de mayo. El PSOE ha quedado como la fuerza más votada e incluso ha mejorado los resultados de Illa de hace un mes. Por su parte, Junts ha experimentado un ligero descenso en el porcentaje de votos, aunque se ha mantenido, por más de tres puntos porcentuales, por encima de Esquerra Republicana, con un 18% frente a un 14,8%, convirtiéndose así en el partido independentista con más papeletas. Un dato también muy relevante bajada de participación experimentada en las urnas catalanas, con un descenso de más del 17% respecto a las elecciones europeas de 2019.
Las comunidades con más votos para Alvise Pérez
El partido Se Acabó La Fiesta, liderado por Alvise Pérez, ha obtenido un total de 800.000 votos y ha quedado como la sexta formación más apoyada por la ciudadanía, logrando además un total de tres escaños. Destacados han sido sus resultados en Ceuta, donde ha conseguido el 7,8% de las papeletas, y en Murcia, donde se ha quedado con el 6,6% de los votos. El partido de este consultor y agitador político ha sido una de las grandes sorpresas de la jornada, generando incomodidad en todo el espectro político. En varias comunidades ha superado el 6%, cosechando en otros resultados algo peores, como en el País Vasco como caso extremo, donde se ha quedado solo con el 1,7% de los votos.