Los fiscales encargados del caso en el que se acusa al Alec Baldwin por homicidio involuntario durante la producción de la película Rust presentaron el lunes de esta semana una solicitud para que en el juicio declarara Hannah Gutiérrez-Reed, la armera responsable de aquella pistola que no debía llevar balas reales y que acabó con la vida de una persona durante el rodaje.
El juicio surge a raíz de los hechos que tuvieron lugar en octubre de 2021, cuando Baldwin disparó, en un entrenamiento de armas por el rodaje, una pistola que debía estar cargada con balas de fogueo y que, no obstante, llevaba en su interior munición real. Ese incidente se saldó con la muerte de la directora de fotografía de la película y con el director con varias heridas.
Sin embargo, poco después ha trascendido que semanas antes de que esta solicitud fuera presentada por los fiscales especiales, esta mujer, que actualmente cumple en la cárcel desde marzo una condena de 18 meses también por homicidio involuntario, fue grabada compartiendo algunas impresiones sobre Baldwin que han dado mucho de qué hablar, recogidas en una serie de documentos judiciales presentados en abril por uno de los letrados.
Unas declaraciones comprometidas
En dichos documentos, que eran resúmenes de llamadas que Gutiérrez-Reed había realizado en prisión con familiares y otros seres cercanos, se entiende que la armera no siente simpatía por el actor de películas como Infiltrados o La caza del Octubre rojo, y que lo que quería era “verlo en la cárcel”. En esos papeles que fueron presentados, además, se declaró la objeción de los fiscales a la solicitud de ella para obtener la libertad condicional en sustitución de la sentencia.
Frente a esta revelación, Jason Bowles, el abogado defensor de Gutiérrez-Reed realizó una serie de declaraciones a medios estadounidenses en las que subrayó que “es realmente injusto caracterizar o seleccionar comentarios que alguien pudo o no haber hecho mientras estaba molesto y recientemente encarcelado”. Además, Bowles cargó contra la acusación, de la que en muchos aspectos, según su punto de vista, no se había visto “preocupación por la justicia en pro de una actitud de ganar a toda costa”.
El papel de la armera en el juicio de Baldwin
El segundo juicio al actor -ya fue declarado inocente en un anterior proceso- nominado a un Óscar en 2004 por The Cooler dará comienzo el próximo 10 de julio. Sin embargo, antes ya ha habido muchos movimientos por parte de la defensa de la estrella de Hollywood, entre ellas una entrevista a Hannah Gutiérrez-Reed el 14 de mayo. En aquel proceso, la armera tomó la decisión de acogerse a la Quinta Enmienda y no decir nada que pudiese incriminarla.
Si en el próximo juicio ella volviese a optar por guardar silencio, sería válido utilizar declaraciones previas de la mujer ante la policía, donde reconoció que debería haber revisado mejor el arma y, por lo tanto, admitiendo su responsabilidad en la muerte de la directora de fotografía Halyna Hutchins y las heridas del director Joel Souza.
Por este motivo, los fiscales del caso de Baldwin han pedido al tribunal que obligue a Gutiérrez-Reed a testificar en el juicio y que se le conceda “inmunidad de uso”, algo que le permitiría realizar cualquier declaración en el juicio sin que ello pudiera luego volverse en su contra y ser utilizado en futuros procesos judiciales. Esto podría ser algo diferencial para Gutiérrez-Reed, que actualmente se encuentra apelando su condena, aunque habrá que ver si las recientes noticias modifican este escenario.