El empresario norteamericano y cofundador de Microsoft, Bill Gates, es uno de los magnates más reconocidos del mundo. Según los últimos datos de Forbes, del pasado mes de mayo, Gates es más rico que nunca, con un patrimonio de casi 128 mil millones de dólares. En numerosas ocasiones, el empresario ha afirmado que es una persona adicta al trabajo, lo que en su época juvenil le dejaba hasta sin comer, priorizando otras tareas.
Sin embargo, los años hacen a uno más sabio. Al final aprendió que el trabajo no lo es todo, y que a menudo, cuanto más se trabaja, menos productivo se es. Por ello, ha compartido en su cuenta de Threads una lección que aprendió de uno de los mayores inversores de Estados Unidos, Warren Buffet.
“Tardé demasiado en darme cuenta de que no tienes que llenar cada segundo de tu agenda para tener éxito. (En retrospectiva, es una lección que podría haber aprendido mucho antes si me hubiera asomado más al calendario intencionadamente ligero de Warren Buffett)”, ha publicado, acompañado de una noticia en la que se aborda cómo estar menos ocupado para ser más feliz.
Buffet ha afirmado en alguna entrevista, que lo único que no se puede comprar con dinero, ni si quiera siendo la persona más rica del mundo, es el tiempo. Por ello que el inversor sea famoso por tener una agenda despejada que le permite dedicar su tiempo a otras actividades fuera de los negocios. Y Gates pudo comprobarlo, por ello subraya la necesidad de dar prioridad a las tareas realmente importantes y evitar confundir la “ocupación constante” con la productividad.
Defiende la reducción de la jornada laboral
En una entrevista de finales de 2023 Bill Gates manifestó su apoyo a la reducción de la jornada laboral, una de las propuestas del acuerdo de gobierno entre el PSOE y Sumar, y afirmó que una semana laboral de tres días podría ser viable gracias a los avances de la inteligencia artificial.
El multimillonario, que fue entrevistado en el podcast ¿Y ahora qué?, lanzó una predicción que dio mucho de qué hablar: los ciudadanos del futuro trabajarán menos días de los habituales.“Si llegamos a una sociedad en la que sólo haya que trabajar tres días a la semana, probablemente esté bien”, defendió el magnate.
Gates no cree que el impacto de la inteligencia artificial vaya a ser “tan dramático como el de la Revolución Industrial”, pero sí que prevé una transformación “tan grande como la que vivimos con llegada de los ordenadores”, capaz de cambiarlo todo “para siempre”, sobre todo en el mercado laboral. “Los empresarios y los trabajadores tuvieron que adaptarse, pero lo hicieron”, ha continuado. La jornada laboral de cinco días, según el inversor americano, podría tener los días contados.
El cofundador de Microsoft ha explicado en el citado podcast que la reducción de la semana de trabajo, facilitada por los avances de la inteligencia artificial, podría suponer un hito para la sociedad en su conjunto. Las máquinas pasarían a ocuparse de las tareas rutinarias, como “producir comida y esas cosas”, mientras que los trabajadores podrían disfrutar de más tiempo libre sin reducir por ello los niveles de rendimiento y productividad.