Los soldados y marineros españoles harán escuchar sus reclamaciones en Madrid. La Asociación de Tropa y Marinería (ATME) ha convocado este sábado una manifestación en las proximidades del Congreso de los Diputados tras varios meses de negociaciones infructuosas con el Ministerio de Defensa, al que acusan de despreciar a los integrantes del escalafón más bajo y numeroso de las Fuerzas Armadas. “Somos los últimos para el Ministerio y también para el Gobierno”, afirma a Infobae España Marco Antonio Gómez, presidente de ATME.
La organización que representa a la tropa decidió realizar esta movilización tras el “rotundo fracaso” del último pleno extraordinario del Coperfas, el organismo en el que las autoridades del departamento de Defensa se reúnen con las distintas asociaciones profesionales de militares. En aquel encuentro, afirman desde ATME, se constató que la cartera que lidera Margarita Robles no tiene ningún plan para mejorar las condiciones salariales de los efectivos de las FFAA. “El Coperfas sirve solamente para lavar la cara al Ministerio, diciendo que cuenta con las asociaciones cuando en realidad no es así”, asegura Gómez.
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Desde ATME han elaborado un documento con 12 propuestas para mejorar la profesión militar. Entre ellas, la más importante tiene que ver con el incremento del salario que perciben los soldados que, en la actualidad, es de 17.833 euros anuales. En este sentido, todas las asociaciones de militares han exigido un incremento salarial de 800 euros para equiparar sus sueldos con los de la Guardia Civil, una inversión que calculan próxima a los 1.400 millones de euros.
Por su parte, ATME también demanda una retribución económica por las horas que excedan de la jornada habitual de trabajo por servicios, ejercicios, prolongación de horario y servicios localizados, con especial atención a “aquellas horas que impliquen nocturnidad, festividad o turnicidad”. Además, solicitan que el Complemento de Dedicación Especial se conceda de forma equitativa y en base a criterios objetivos preestablecidos, con la debida publicidad. Esto último responde a que esta retribución complementaria, afirman desde ATME, es usada muchas veces como extorsión por parte de los mandos dado que la misma es de asignación discrecional.
Gómez asegura que las FFAA no perciben un “incremento real” de sus salarios desde que el socialista José Bono estaba al frente del Ministerio de Defensa, durante la primera etapa del gobierno de Zapatero: “Desde entonces nada. Nosotros hemos vivido en el ostracismo con los dos partidos que han estado en el Gobierno, tanto el PP como los socialistas”. El presidente de ATME también apunta a la decepción que para ellos ha supuesto Robles como ministra. “Cuando tomó la cartera parecía que iba a cambiar las Fuerzas Armadas, pero la realidad es que solamente le gusta hacerse fotos a pie de un avión y dar medallitas, no remangarse para arreglar los problemas de la tropa”, señala.
Profesión de riesgo
Durante la manifestación los soldados también solicitarán que Defensa inicie de inmediato el proceso para que su profesión sea considerada de riesgo. “Los militares se juegan su vida y su salud en muchas facetas de su trabajo. Por dignidad, para avanzar en sus derechos profesionales y por sus familias ese riesgo debe ser reconocido”, sostienen desde ATME.
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De acuerdo a datos proporcionados por el Gobierno, entre 2011 y 2022, perdieron la vida 195 soldados en el cumplimiento del deber. De este total, 18 militares fallecieron mientras se encontraban desplegados en el exterior, en alguna de las tantas misiones internacionales en las que participa España. En este sentido, el año más mortífero fue 2011, cuando murieron hasta 32 militares, seis de ellos mientras desempeñaban sus funciones fuera de las fronteras españolas.