Estos son los consejos de la DGT para conducir con altas temperaturas

Ahora que todo indica que el calor ha llegado para quedarse y las temperaturas elevadas se volverá la tónica de las próximas semanas y meses, tal como lo prevé la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Aunque las recomendaciones para combatir el calor son numerosas y abarcan tanto el exterior como el interior de las viviendas, es crucial tener en cuenta las implicaciones que las altas temperaturas pueden tener sobre la conducción de vehículos.

Para hacer frente a estos desafíos, la Dirección General de Tráfico (DGT) proporciona una serie de consejos esenciales para asegurar un viaje sin imprevistos. La DGT insiste en la importancia de seguir estas recomendaciones para garantizar la seguridad en las carreteras durante los días de altas temperaturas ya que, con la correcta preparación, es posible disfrutar de un viaje seguro, a pesar de las altas temperaturas de esta época del año.

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Ropa adecuada: El conductor debe utilizar ropa holgada, fresca y transpirable, que ofrezca comodidad durante el viaje y evite que el cuerpo se recaliente innecesariamente. Esto no solo contribuye al bienestar del conductor, sino que también reduce el riesgo de sufrir golpes de calor.

Calzado: Aunque en verano son comunes las chancletas, es preferible optar por zapatos o zapatillas que se ajusten bien al pie y sean flexibles para facilitar los movimientos necesarios al volante.

Ventilación del vehículo: Es fundamental ventilar el vehículo antes de iniciar la marcha. Abrir todas las puertas al mismo tiempo permite expulsar el aire caliente acumulado en el interior, especialmente si el coche ha estado aparcado en la calle bajo el sol. Una adecuada ventilación evita que la temperatura interna alcance niveles extremos en solo un par de horas.

Temperatura adecuada en el coche: Mantener una temperatura cómoda dentro del vehículo es esencial para evitar contrastes y cambios bruscos respecto al exterior. La DGT recomienda que el aire acondicionado o el climatizador se mantenga entre 21 y 23 grados. Además, si la temperatura interna baja de los 20 grados, el consumo de combustible puede aumentar hasta un 20%. Como el aire frío pesa más que el caliente, es aconsejable dirigir el flujo hacia el techo del coche para enfriar el habitáculo de arriba a abajo de forma más eficiente.

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Visibilidad y señales de tráfico: Conducir con una temperatura de 35 grados puede reducir hasta en un 20% la capacidad de ver las señales de tráfico, según advierte la DGT. Este dato subraya la importancia de mantener el vehículo bien acondicionado para preservar la atención y capacidad visual del conductor.

Horarios de conducción: Evitar conducir durante las horas de mayor calor, entre las 13.00 y las 17.00 horas, es una medida prudente. El momento óptimo para ponerse en marcha es entre las 08.00 y las 09.30 horas, cuando las temperaturas aún no han alcanzado su pico.

Hidratación: Mantenerse hidratado es vital. Se recomienda beber agua con regularidad, incluso si no se siente sed. La deshidratación puede disminuir la concentración y aumentar el riesgo de accidentes.

Alimentación: Es recomendable evitar la conducción después de comidas copiosas, ya que el proceso de digestión puede provocar somnolencia y disminución de reflejos.

Protección contra deslumbramientos: Los rayos solares directos pueden causar deslumbramientos peligrosos. Utilizar gafas de sol adecuadas ayuda a mitigar estos reflejos y mejora la visibilidad.