Desde que arrancó Supervivientes 2024, Ángel Cristo Jr. ha sido uno de los grandes protagonistas de esta edición, ya sea por los diferentes rifirrafes que ha tenido con sus compañeros, su boda con Ana Herminia o su disputa con Arantxa del Sol. Sin embargo, su comportamiento en los últimos días ha obligado a Mediaset a tomar medidas drásticas.
El hijo de Bárbara Rey ha puesto rumbo a España tras haber sido expulsado disciplinariamente del reality, pues se saltó el perímetro de seguridad en el que se lleva a cabo el rodaje del concurso en Cayos Cochinos, lo que obligó a las Fuerzas Armadas de Honduras a intervenir para conseguir dar con él durante las 3 horas que permaneció ausente. Una situación que ha traído al presente el momento en el que su hermana, Sofía Cristo, también recibió la mayor sanción disciplinaria durante su paso por Secret Story, en 2021.
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La hija de Ángel Cristo perdió los papeles y acabó agrediendo a su compañero, Miguel Frigenti, con quien fuertes enfrentamientos desde el inicio del programa. Sofía se abalanzó sobre el colaborador de televisión en pleno directo y el resto de los participantes tuvieron que intervenir. En aquel entonces, Telecinco tuvo claro que este tipo de actitudes violentas no se toleran en un reality y, casi al instante, comunicó a la participante su expulsión del programa. Dos años después, la realidad es otra.
Las salidas involuntarias de Sofía Cristo y Ángel Cristo Jr. de dos realities han convertido a Bárbara Rey en el primer personaje público cuyo dos hijos han sido expulsados disciplinariamente de Mediaset. La pareja de Ana Herminia se saltó las normas del programa e invadió un área que tienen terminantemente prohibido acceder, pues el reality se desarrolla en el entorno de un Monumento Natural Marino gestionado por la Fundación Hondureña para los Arrecifes de Coral.
Tras conseguir localizarle, el exparticipante explicó que psicológicamente se encontraba al límite y que no ha pensado en las consecuencias que podrían tener sus acciones. “No me encuentro bien, pero antes de nada, quiero pedir disculpas a la organización, al programa y a todas las personas que se han preocupado por mí”, afirmó durante la emisión de Supervivientes: Tierra de nadie.
Además, justificó su actuación poniendo en el centro de los focos lo ocurrido con Arantxa del Sol hace unas semanas, cuando ella todavía se encontraba en el concurso. Y es que la pareja de Finito de Córdoba reconoció haber dado “una colleja” a su compañero en el momento en el que se desplazaban en barca entre dos localizaciones y, por lo tanto, no había cámaras grabándoles.
“Me da igual las consecuencias que tenga. Entonces también deberíamos hablar de cuando Arantxa del Sol me pegó en la lancha. Había testigos y no se tuvo en cuenta. Y como no se grabó, no existe. El equipo sí lo sabía”, manifestó Ángel Cristo Jr., dando a entender que el espacio de Mediaset era consciente de lo sucedido, mas no tomó cartas en el asunto sobre la violenta actitud de la exconcursante. Algo que dista mucho de las medidas llevadas a cabo por Telecinco con Sofía Cristo en Secret Story. “Se le permitió estar aquí, se fue por decisión del público. Eso no es así”, zanjó.
“Tres soberanos puñetazos”
Kiko Matamoros matizó la versión que Arantxa del Sol dio sobre lo sucedido con Ángel Cristo Jr. en el programa Ni que fuéramos del Canal Quickie. “Fue infinitamente más grave de lo que ha contado. La realidad es que Arantxa le asestó tres soberanos puñetazos a Ángel Cristo”, afirmó el televisivo.
Según Matamoros, cuando el hijo de Bárbara Rey se dispuso a contar en directo lo sucedido, el programa “entra en pánico porque había planes para Arantxa una vez que saliera del concurso”. Y es que, al parecer, la exmodelo se cerró “con la promesa de volver a Telecinco a presentar un programa”. De acuerdo con el testimonio del excolaborador de Sálvame, la dirección de Supervivientes intentó a toda costa que esta agresión no trascendiera para no frustrar sus planes profesionales con la agresora, llegando incluso a presionar a Ángel para que no hiciera público lo ocurrido.
“Ángel Cristo es evacuado en una barca, se pierde durante tres horas y se le conmina a que olvide el episodio, que no lo nombre. Se le presiona para que actúe de esa forma, se ve forzado a silenciarlo y a callar bajo amenazas”, explicó Matamoros. “Se le lleva a un punto donde se reúne con el director del programa, que le da las consignas para que ayude a transmitir el deseo de la dirección y que se sofoque el interés de Ángel porque esto se haga público”, zanjó.