Jesús Sánchez (@jesusansal) es un joven español que actualmente vive en Utrecht, en Países Bajos, donde es creador de contenido. Desde allí, comparte con sus seguidores -más de 670.000 solo en TikTok- vídeos sobre su estilo de vida y, en especial, sobre alimentos y otros productos de cocina.
Así, desde finales de abril, Jesús ha iniciado un viaje por distintos países europeos. Primero estuvo en Inglaterra y ahora se ha quedado en Alemania. Es allí donde, por razones económicas, ha decidido pasar la noche en un convento de monjas, una experiencia tan llamativa que ha decidido compartirla con sus followers a través de lo que él ha bautizado como un conventotour. “Os voy a enseñar la habitación donde se quedan a dormir las monjas, que tienen aquí un bussiness montado... Las monjas alemanas están sembradas”.
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El interior del edificio
De hecho, lo primero que ha querido compartir en el vídeo ha sido la misma puerta del convento, que se abría sola. “Son modernas hasta las monjas, aquí en Alemania” se ha sorprendido Jesús. Una vez dentro, explicó la distribución de la planta principal. “Nada más tenemos aquí a mano derecha la capilla, por si quieres echarte un rezo”. Sin embargo, lo más ha sorprendido al creador de contenido ha sido la particular tienda que quedaba al otro lado. “Mira”, ha enseñado, “por si se te pone la boca seca, aquí tienes cervezas benedictinas hechas por los monjes alemanes. En España hacen pastitas y esta gente vende ahora cerveza”. “Y si te quieres llevar de recuerdo un vasito del convento aquí tienen hasta merchandising, niños”, ha añadido mientras mostraba un vaso con el logo del convento.
También en esa primera planta estaba el patio, donde Jesús ha encontrado “bien colocados todos los tacataca en el pasillo”, al estar las monjas en misa. “Pero este no es un patio cualquiera, es un patio andaluz. Aquí ellas se dan sus vueltecitas, sus retiros espirituales y sus paseos”.
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Las habitaciones de las monjas
El convento que ha mostrado el creador de contenido tiene dos plantas. En la primera viven las monjas, y en la segunda los feligreses y los huéspedes que se queden temporalmente allí. “Mira qué bonito”, ha exclamado el tiktoker cuando ha mostrado su propio cuarto y ha mostrado todo lo que incluía. “Aquí nos han puesto dos camitas individuales, que aquí el pecado no se puede cometer, un Jesucristo aquí siempre presente, una mesita de escritorio por si quieres hacer tus estudios, y aquí tenemos por supuesto una Biblia en alemán, que yo no entiendo ni papa pero bueno, está bien tenerla”. Además, un último elemento le ha llamado la atención, de nuevo por su modernidad. “Nos han dejado esto aquí para dejar un review”, ha explicado mientras mostraba una tarjeta con varias casillas por rellenar.
Pero si la habitación era solo para él y su acompañante, el lavabo en cambio debían compartirlo “con otros feligreses o con las monjas, depende del día”. Aún así, la zona tenía todo lo que alguien puede necesitar, incluso una bañera. “Aquí me pegué yo ayer una ducha que me quedé como los dioses”, ha confesado, “no le falta detalle, hasta la agarradera tiene. Estas monjas piensan en todo”.
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Sin embargo, lo que más le ha gustado a Jesús han sido las vistas, tal y como ha contado en el vídeo: “A noche llegué de madrugada y no se veía nada, pero esta mañana hemos corrido las persianas y de repente tenemos vistas al cementerio de las monjas al convento”. A lo lejos, en efecto, se puede ver un bosque con un claro en el que hay varias lápidas. “Un poquito turbio”.
Cuánto cuesta quedarse una noche
“A todo esto”, ha concluido Jesús, “os preguntaréis cuánto vale quedarse aquí a dormir en un convento de monjas alemanas”. La respuesta la ha dado a continuación: 30 euros la noche “con todo incluido”. No obstante, luego ha reconocido que eso del todo incluido no era del todo cierto, ya que “tampoco te van a dar de comer las monjas”. Con todo, la diferencia respecto a otros alojamientos es muy notoria: “Aquí te vale un hotel 200 euros”.