El ‘thriller’ de acción que arrasa en Netflix nada más estrenarse

‘Mercy’ ya ocupa el puesto número 2 de las más vistas en el catálogo de la plataforma de ‘streaming’, a pesar de las malas críticas

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Un momento de 'Mercy'
Un momento de 'Mercy'

Ya lo ha dicho Francis Ford Coppola en el Festival de Cannes esta semana: “El streaming es lo que antes solíamos llamar home video”. El director, que presentaba su nueva película, Megalopolis, se refería así a las películas que se hacían destinadas directamente al videoclub, en formato VHS, sin pasar antes por las salas de cine. Muchas joyas del cine de género se produjeron y distribuyeron de esta manera, pero en general el home video era la nueva serie B, un formato menor destinado a obras sin categoría para llegar a los cines. Por ello, preguntado por el éxito de las plataformas de streaming, Coppola soltó esta pulla.

Las películas que más éxito tienen en plataformas como Netflix, sin embargo, parecen darle la razón: todas las semanas hay algún nuevo filme del que nunca habíamos oído hablar antes, dirigido por un semidesconocido y protagonizado por actores venidos a menos que de pronto se convierte en un hit global, según los datos -siempre puestos en duda- distribuidos por las propias empresas. El último caso es el del thriller de acción Mercy. Un vistazo al cartel lo dice todo.

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El cartel de 'Mercy'
El cartel de 'Mercy'

La película, que se acaba de estrenar, ya ocupa el puesto número 2 de las más vistas en el catálogo de Netflix. ¿Y de qué va? Esta es la sinopsis oficial: “Una exmédica se ve inmersa en una batalla mortal por la supervivencia cuando la mafia irlandesa se hace con el control del hospital en el que trabaja. Cuando su hijo es tomado como rehén, se ve obligada a confiar en su pasado aguerrido y sus habilidades letales después de darse cuenta de que no queda nadie más que ella para resolver la situación”.

El filme está dirigido por Tony Dean Smith, conocido -es un decir- por títulos como Un desconocido en tu casa, Volition, Amor bajo el arcoíris y Extraños bajo el mismo techo. Los actores son Leah Gibson, Jonathan Rhys-Meyers y Jon Voight (el padre de Angelina Jolie y ganador del Oscar en 1978 por Coming Home, pero que lleva mucho tiempo en horas bajas). Y la duración es de apenas 85 minutos.

La película cuenta con unas críticas nefastas, que a menudo van en una relación inversamente proporcional con el éxito que tienen en el streaming. En Rotten Tomatoes, tiene un 0% de reseñas positivas por parte de los críticos y un 21% por parte de la audiencia. “En el caos del mundo cinematográfico post-pandemia, con la huelga de guionistas, las puertas de Hollywood cerradas y los estrenos pospuestos acumulándose en las bóvedas de los estudios y en los estantes de las salas de edición, una plétora de películas de bajo presupuesto listas para dispositivos de streaming, pero no para su emisión en horario estelar, está saturando el mercado. La mayoría de estas películas son indescriptibles, in-criticables e inestrenables, y no estoy bromeando. Nunca había visto tal montón de basura.”, señala Rex Reed en el Observer.

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Con opiniones como estas, pronto escucharemos que, según Netflix, la película ha tenido 8.000 millones de vistas en solo una semana.

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