La portavoz de la Ejecutiva Federal del PSOE, Esther Peña, ha subrayado que el candidato del PSC y ganador de las elecciones catalanas, Salvador Illa, es “el único con opciones reales para ser presidente” de la Generalitat y confía en que ERC juegue un papel “determinante” en las negociaciones. Peña ha asegurado que el resultado de las elecciones autonómicas no tendrá “ninguna repercusión en la gobernabilidad” en España, ya que entiende que “no hay alternativa” a un Gobierno de Sánchez.
”El PSOE firmó acuerdos de gobernabilidad con muchos partidos, también con Junts y ERC. El PSOE cumple sus acuerdos y no tengo ninguna duda de que el resto harán lo mismo”, ha añadido en una rueda de prensa tras la reunión de la Ejecutiva Federal celebrada este lunes bajo la presidencia de Pedro Sánchez para analizar los resultados de los comicios catalanes.
Además, ha asegurado que Sánchez “ha validado su hoja de ruta” con los resultados de las elecciones catalanas y no tiene “ninguna duda” de que su Gobierno seguirá funcionando “a pleno rendimiento” en lo que queda de legislatura “con una agenda legislativa intensa e intensiva”.
Información elaborada por Efe
La Assemblea Nacional Catalana (ANC) ha pedido este lunes a los partidos independentistas que retomen la “unidad de acción” y fuercen una repetición electoral en la que nuevos liderazgos deberían encabezar “un renovada estrategia independentista”.
En un comunicado, esta entidad señala que el independentismo, pese a haber perdido la mayoría parlamentaria, sí puede “bloquear que se imponga una mayoría autonomista” y, a partir de aquí, “volver a activar la mayoría social independentista en los próximos meses”. Pide así a Junts, ERC y la CUP que “no den ningún voto ni abstención” al PSC, que con 42 escaños ha sido la candidatura que ha logrado más apoyos.
Información elaborada por Efe
Tras las recientes elecciones en Cataluña, la región entra en un periodo postelectoral lleno de incertidumbres, marcado por la lucha por la presidencia del Parlament y la potencial investidura, que tienen como protagonistas a Salvador Illa y Carles Puigdemont. De acuerdo a las normas, el Parlament debe estar constituido dentro de los veinte días hábiles después de los comicios, fijando como fecha límite el 10 de junio, justo después de las elecciones europeas y considerando el día festivo del 20 de mayo en Cataluña.
La portavoz del PSC, Núria Parlon, ha afirmado que el PSC no apoyará la investidura de Carles Puigdemont aunque les “amenace con bloquear la gobernabilidad en España”.
Lo ha dicho este lunes en una rueda de prensa en la sede del partido tras la reunión de la Comisión Ejecutiva del PSC, en la que ha instado a Puigdemont a “aceptar el principio de realidad” respecto a la victoria en votos y escaños que han obtenido los socialistas en las elecciones de este domingo.
Asimismo, Parlon ha anunciado que el PSC ha constituido este lunes una comisión negociadora para iniciar las negociaciones con el resto de formaciones políticas, excepto Vox y Aliança Catalana.
(Información elaborada por Europa Press)
Pere Aragonès no recogerá su acta de diputado. El todavía presidente de la Generalitat de Cataluña ha comunicado que abandona la primera línea de la política tras el mal resultado de ERC este domingo, que deja al partido como segunda fuerza del independentismo y en una delicada situación que le obliga a decidir entre enterrar el procés haciendo presidente a Salvador Illa o provocar unas nuevas elecciones.
El nuevo Parlament catalán surgido de las elecciones de este domingo se deberá constituir como tarde el 10 de junio, dentro del plazo de 20 días hábiles siguientes a las elecciones, y después, el presidente o presidenta de la Cámara contará con 10 días hábiles para proponer un candidato a la investidura, un plazo que finalizaría el 25 de junio.
En un comunicado este lunes, la Cámara catalana ha explicado que el presidente de la Generalitat en funciones, Pere Aragonès, deberá convocar la primera sesión constitutiva de la Cámara a través de un decreto, en la que se elegirá un nuevo presidente o presidenta del Parlament, las dos vicepresidencias de la Mesa y las cuatro secretarías.
La primera sesión de la legislatura estará presidida por el diputado de más edad, asistido por los dos diputados más jóvenes, en lo que se denomina ‘mesa de edad’, hasta que se escoja la nueva Mesa del Parlament.
Para acceder a la plena condición de parlamentarios, los 135 diputados electos deberán entregar en el registro del Parlament la credencial expedida por la Junta Electoral, el escrito de promesa o juramento de la Constitución y del Estatut, la declaración de sus actividades profesionales, laborales o empresariales y los cargos públicos que ejercen, así como la declaración de bienes, que debe detallar su patrimonio.
Esta documentación la pueden entregar personalmente o delegar la tramitación al personal del grupo parlamentario del que formarán parte.
Para la sesión de investidura, el candidato a presidir la Generalitat necesitará el apoyo de 68 diputados en primera votación y, si no lo consigue, de mayoría simple en segunda votación dos días después.
Si han pasado dos meses desde la primera votación de investidura y no se ha podido elegir ningún candidato, el Parlament se disuelve automáticamente y Aragonès deberá convocar nuevas elecciones de manera inmediata para que se hagan en el plazo de 47 días después de la convocatoria, con una campaña electoral reducida a 8 días.
(Información elaborada por Europa Press)
Carles Puigdemont ha vuelto a comparecer este lunes para valorar los resultados de las elecciones celebradas este domingo. Junts sube y lidera el independentismo, pero no puede gobernar porque carece de mayoría, un escenario delicado para el expresident, que se comprometió a dejar la política si no lograba volver al Palau de la Generalitat. Puigdemont ha insistido en que “sería muy mala noticia” tener que repetir elecciones e informado de que ya ha establecido un primer contacto con ERC y que pretende presentarse a la investidura. Eso sí, y como ya animó al anunciar su candidatura, ha llamado al separatismo a la reflexión. Está preocupado por la abstención, por esa pérdida de la mayoría, por la desunión de las fuerzas que persiguen un mismo objetivo.
El portavoz de los Comunes en el Parlament, David Cid, ha expresado la voluntad de su formación de negociar un acuerdo entre los partidos de izquierdas para formar un tripartito con el PSC y ERC a fin de llevar a cabo políticas progresistas en Cataluña. Es decir, facilitarán un gobierno con Salvador Illa de president. En declaraciones a TV3, ha admitido que Comuns Sumar no ha obtenido “los resultados esperados” porque han perdido dos diputados (de los ocho a seis) y unos 13.000 votos: “Tendremos que hacer un análisis crítico de nuestros resultados”.
La candidata de la CUP, Laia Estrada, ha calificado como ambigua la propuesta que hizo anoche Carles Puigdemont, que llamó a ERC a una alianza para crear, dijo, un gobierno de obediencia netamente catalana: “Me parece que abre la puerta al autonomismo”. En una entrevista concedida a ‘Els Matins’ de TV3, ha opinado que “no es lo mismo un Govern de obediencia netamente catalana que un Govern de obediencia independentista”, y ha avisado que la CUP no apoyará a Junts si defienden la agenda de la vieja Convergència.
Aliança Catalana lo ha conseguido. La formación de ultraderecha, que tiene el germen de su éxito en las elecciones en Cataluña este pasado domingo en la alcaldesa de Ripoll (Girona), Sílvia Orriols, ha logrado no solo entrar en el Parlament sino hacerlo con dos escaños. Además de Orriols será diputado Ramón Abad, cabeza de lista por Lleida. Lejos del foco de los grandes, incluso en el marco de la derecha, Aliança ha logrado 118.302 votos, un 3,78% del total.