La Guardia Civil ha llevado a cabo la detención de 102 personas en varias provincias de España, entre ellas Alicante, Barcelona, Girona, Granada, Madrid, Málaga y Valencia, por presuntamente estar implicadas en una estafa masiva que ha afectado a un total de 238 víctimas. Este grupo criminal se dedicaba a engañar a las personas haciéndose pasar por familiares directos que se encontraban en situaciones de emergencia y necesitaban una transferencia de dinero urgente para solventarla. Con este procedimiento, los delincuentes se han hecho con un botín de próximo a los 850.000 euros, según ha informado la Benemérita.
Las sumas solicitadas a su víctimas variaban significativamente dependiendo el caso, con transferencias que iban desde los 800 euros hasta los 55.000 euros en casos muy puntuales. Para llevar a cabo estas estafas, los criminales utilizaban más de 500 cuentas bancarias de distintas entidades y más de 100 líneas telefónicas, registradas bajo identidades falsas, lo que les permitía ejecutar el fraude de manera efectiva a través de conocidas aplicaciones de mensajería móvil.
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Las primeras alertas sobre esta actividad delictiva surgieron a finales de 2022 en la provincia de Alicante, donde numerosos ciudadanos denunciaron haber sido engañados por individuos que se hacían pasar por sus hijos, quienes alegaban encontrarse en aprietos y necesitar de manera urgente dinero. Este modus operandi, conocido como la estafa del hijo en apuros, se basa en la explotación de la confianza y el afecto parental hacia sus hijos, quienes, preocupados por su bienestar, no dudan en realizar las transferencias solicitadas.
Una red extendida por toda España
Este grupo criminal no sólo estafaba a sus víctimas sino que también se encargaba de blanquear el dinero obtenido a través de compras en diversos comercios y extracciones de efectivo en cajeros automáticos. Operaban distribuidos por todo el país, lo que requirió una respuesta policial coordinada y en varias fases para poder desarticular la red.
La operación Hiwaso, desarrollada en varias etapas a lo largo de los primeros meses de 2024, culminó con la detención de todos los implicados. La primera fase, en febrero, resultó en la detención de 41 personas en Granada y Málaga. Entre febrero y marzo, se detuvieron a 18 más en Alicante, Valencia y Madrid. La fase final, en los últimos días de abril, llevó a la detención de 43 individuos en Barcelona y Girona, ha informado la Guardia Civil.
Los detenidos, 74 hombres y 28 mujeres con edades comprendidas entre los 20 y los 60 años, han sido acusados de estafa, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal. Las diligencias realizadas han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Torrevieja, encargado de la causa.
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La investigación, a cargo de la Guardia Civil de Alicante junto con la colaboración del Equipo de Delitos Telemáticos y el Equipo de Delitos Urbanísticos, ha demostrado la complejidad de estas redes criminales que utilizan la tecnología y la manipulación emocional para cometer sus delitos, dejando a cientos de familias afectadas tanto emocional como económicamente.