La decisión del Banco Central Europeo (BCE) de retrasar la bajada de los tipos de interés de la primavera, como preveían los mercados, al verano, en concreto a junio, ha hecho que los bancos españoles den un giro de timón en su negocio de depósitos y, tras bajar su rentabilidad, la han vuelto a subir. A pesar de esta remontada, siguen siendo menos generosos que su competencia de la zona euro.
Según los últimos datos del eurobanco, la rentabilidad media que ofrecieron en febrero los bancos españoles por sus depósitos a plazos inferiores a un año se situó en el 2,37%, lo que supone un aumento de casi un punto y medio respecto al mismo mes del año anterior. Pero es inferior a la que da la banca europea a ese mismo plazo, que alcanzó el 3,2% de media.
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Lo mismo ocurre con los depósitos a más de un año de vencimiento que la banca española retribuyó en febrero con un interés medio del 2,47%, frente al 3,02% de las entidades de la eurozona. Mientras que en plazos de más de dos años, nuestra banca remuneró con un 2,4% y el conjunto de la zona euro con un 3,17%.
Intereses de hasta el 4%
Estas diferencias se producen incluso después de que los bancos españoles hayan aumentado los intereses de sus plazos fijos hasta superar, en los mejores casos, el 4% de rentabilidad.
“Hace unos meses parecía poco probable que a día de hoy aún se pudieran conseguir rentabilidades cercanas al 4%, pero la realidad ha sido otra. Aunque varios bancos comenzaron a bajar el interés de sus productos de ahorro hace meses ante la previsible bajada de tipos que finalmente no llegó, los recortes se han moderado y algunos bancos han vuelto a subir el interés de sus plazos fijos”, señala Javier Mezcua, experto en finanzas personales de HelpMyCash.
Este cambio de estrategia hará que los ahorradores a los que ahora les venza un depósito van a tener un panorama mucho mejor del que se podían esperar hace unos meses, y podrán renovar sus plazos fijos asegurándose un tipo de interés atractivo durante varios años.
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Y es que los depósitos se han convertido en productos refugio tras la subida de la inflación y en muchos casos están dando intereses que la están batiendo, teniendo en cuenta que cerró marzo en el 3,2%, según datos del Instituto Nacional de Estadística.
Los más generosos
Los depósitos que mejor retribuyen a los ahorradores son los de corto plazo. El más rentable es el Gran Depósito de Banco Big, con un tipo de interés nominal (TIN) del 4,1% a seis meses. Le sigue muy de cerca el de MyInvestor, que a un plazo de tres meses da un 4% TAE.
La misma rentabilidad, un 4% TAE, da el depósito a seis meses de Banco Mediolanum y rozando este interés se sitúa el depósito a tres meses de Cetelem con un 3,96%.
Igual retorno da Novum Bank, pero a un plazo de 12 meses, seguido por Banco Finantia que paga un 3,6% TAE a un año. A más largo plazo, dos años, los más dadivosos son los depósitos de Banca Progetto, con un interés del 3,59%, SmeBank, con un 3,49%; Haitong, con el 3,49%; CA Auto Bank, que ofrece un 3,49%, y Banca Sistema, con el 3,49%.
Aprovechar la remuneración actual
En este contexto, los analistas recomiendan a los ahorradores, sobre todo a los más conservadores, que aprovechen el momento y contraten depósitos, ya que cuando el BCE empiece a bajar los tipos de interés, los bancos harán lo mismo con sus plazos fijos.
Prevén que los tipos puedan situarse cerca del 2% a finales de 2025, por lo que la rentabilidad del 4% que se puede lograr ahora, desaparecerá, salvo en ofertas puntuales destinadas a captar clientes o en bancos que necesiten liquidez, advierten desde HelpMyCash.
Inciden en que “los ahorradores que quieran asegurarse un tipo de interés atractivo no pueden dormirse y aquellos que no necesiten sus ahorros próximamente pueden plantearse contratar un depósito a largo plazo para asegurarse un tipo de interés alto cuando los tipos empiecen a bajar”.