Jubilación activa en autónomos: estos son los cambios que plantea el Gobierno

El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones que dirige Elma Saiz presentó en las últimas semanas una propuesta de reforma de la jubilación a la mesa de diálogo social, integrada por representantes de la patronal y sindicatos. En dicho borrador, el Ministerio está valorando eliminar la posibilidad de que los autónomos en jubilación activa cobren el 100% de sus pensiones desde el segundo año, tengan o no un trabajador por cuenta ajena contratado. La propuesta del Gobierno estudia que los trabajadores por cuenta propia estén obligados a esperar cinco años para obtener el 100% de su pensión, según explicó la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA).

El presidente de ATA, Lorenzo Amor, valoró que se trata de “un recorte de derechos impropio de un Gobierno que se quiere llamar progresista”, y que la medida penalizaría tanto a autónomos como a asalariados que quieran seguir trabajando más allá de la edad ordinaria de jubilación. Considera que esta medida no hace atractiva la jubilación activa para autónomos, ya que a muchos no les compensaría continuar al frente de su negocio. “Que ahora haya que esperar, prácticamente, a que el autónomo tenga 71 años o 72 años para cobrar el 100% de la pensión de jubilación activa”, explicó Amor.

Bajo el nuevo esquema, se elimina el incentivo que permitía a los trabajadores autónomos acceder al 100% de su pensión al tener contratado al menos un trabajador. La medida introduce un acceso progresivo a la pensión, que comienza con un porcentaje del 30% para el primer año después de alcanzar la edad de jubilación, sin importar si el jubilado tiene empleados a su cargo o no.

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De esta forma, un autónomo con asalariado a cargo ya no podría cobrar el 100% de su pensión mientras trabaja. La propuesta del Ejecutivo eliminaría el derecho a acceder a la totalidad de la prestación, y debería esperar cinco años para poder obtenerla. “Ahora se puede cobrar la pensión completa al año siguiente de cumplir la edad legal de jubilación. Suprimir el plus adicional que tenían los autónomos que mantenían el criterio para llegar al 100% es una barbaridad”, apuntó Amor.

La nueva propuesta introducida por Elma Saiz establece una estructura de acceso progresivo al 100% de la pensión para los trabajadores que opten por la jubilación activa. Este esquema comienza permitiendo el cobro del 30% de la pensión una vez que ha transcurrido un año desde la llegada a la edad legal de jubilación. Si se continúa activo, el porcentaje aumenta al 40% al segundo año, 50% al tercer año, 75% al cuarto año, y finalmente, al quinto año se permite el cobro completo del 100% de la pensión.

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Además, la iniciativa propone cambios significativos en los requisitos para acceder a este modelo de jubilación activa. Se facilita la compatibilidad de la jubilación activa con el complemento de demora, lo que significa que los jubilados podrían beneficiarse del incremento anual del 4% en la cuantía de su pensión o de una cantidad a tanto alzado por cada año cotizado desde la fecha ordinaria de jubilación hasta el inicio del cobro de la pensión. Asimismo, se elimina la obligación de tener completada una carrera de cotización completa para acceder a estos beneficios.

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No obstante, tanto ATA como patronal y sindicatos han reafirmado que esta reforma supone una pérdida de derechos para los trabajadores, algo impropio de “un gobierno progresista”, según indicó Amor. Celia Ferrero, vicepresidenta de ATA, explicó al diario AutonomosyEmpresas que “La edad media efectiva de jubilación del autónomo ya está por encima de la edad ordinaria. El retraso de la edad efectiva no puede venir del colectivo de trabajadores por cuenta propia para poder amortizar la ampliación a otros colectivos de jubilarse anticipadamente y extender la jubilación parcial”. Los autónomos, según indicó Ferrero, ya se jubilan casi dos años de media más tarde que los asalariados.

A partir de 2024, bajo las regulaciones actuales, los autónomos necesitarían haber llegado a la edad de jubilación y tener suficientes años cotizados para comenzar a percibir la mitad o la totalidad de su pensión durante el primer año de retraso, dependiendo de si tienen empleados. Con las nuevas reglas, en 2025, estos mismos trabajadores solo podrían acceder al 30% de su pensión, y tendrían que esperar hasta 2030 (con más de 70 años) para recibir la pensión completa, amenazando así la viabilidad de continuar con sus negocios mientras envejecen.