El Banco de España ve “mucho margen de mejora” en la estabilidad del empleo tras la reforma laboral de 2021

Sigue habiendo una elevada rotación en la contratación y la supervivencia de los contratos solo ha aumentado ligeramente, aunque ha servido para impulsar el consumo de los hogares

Guardar
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social. (Alberto Ortega - Europa Press).
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social. (Alberto Ortega - Europa Press).

España siempre ha sido líder en temporalidad y en inestabilidad laboral en comparación con los países de la UE, problemas que la reforma laboral aprobada a finales de 2021 pretendió atajar de manera prioritaria modificando los tipos de contratos. Si bien la temporalidad contractual cayó rápidamente durante 2022 y ya se sitúa en niveles europeos en el sector privado, conseguir que las empresas generen empleos estables supone una transformación más ambiciosa y lenta en la que apenas se ha avanzado.

Según el Banco de España, sigue habiendo una elevada rotación en la contratación y la supervivencia de los contratos solo ha aumentado ligeramente. La reforma restringió la contratación temporal, pero a cambio introdujo flexibilidad en una de las modalidades indefinidas (la fija discontinua) a la que se han trasladado muchas de las prácticas habituales de las empresas en el anterior modelo. En el capítulo del Informe Anual de 2023 dedicado al mercado laboral, el supervisor bancario español concluye que los empleos en España siguen siendo menos estables que en la UE y pide al Gobierno que lo evalúe.

Te puede interesar: Escaso efecto de la reforma laboral en la educación: las bajas de afiliación para no pagar las vacaciones se mantienen

La tasa de temporalidad ha pasado del 25,4% del último trimestre de 2021, el último antes de la entrada en vigor de la reforma, al 16,5% en el mismo periodo de 2023. El descenso ha sido mucho más acusado en el sector privado, donde la temporalidad ha caído al 13,2%, ligeramente por debajo de la media de la UE. Sin embargo, este rápido cambio en la modalidad de contratación tiene detrás dinámicas que hacen persistir la inestabilidad laboral. Se trata del primer análisis que el Banco de España elabora en este sentido tras la aprobación de la reforma y recalca que no supone una “valoración causal” de la misma, sino un ejercicio descriptivo, porque no tiene en cuenta variables como el ciclo económico.

El supervisor bancario español señala que la rotación, medida como la ratio entre la suma de altas y bajas mensuales en la Seguridad Social y el stock de trabajadores asalariados, ha descendido ligeramente. En concreto, ha pasado del 1,33% de media en el periodo 2015-2019 al 1,12% en 2022-2023. Esto se debe a un menor porcentaje de trabajadores con contrato temporal, que antes encadenaban relaciones laborales sin cambiar de puesto, y al aumento de los indefinidos, pero la rotación ha crecido entre estos últimos (del 0,25% al 0,61%). Esto se explica por los fijos discontinuos, cuya tasa de baja se ha casi duplicado desde 2022 hasta situarse al mismo nivel que la que tienen los contratos temporales (el 3,19%).

No obstante, la medida más precisa sobre la estabilidad en el empleo es el nivel de supervivencia de los contratos. Del conjunto de relaciones laborales creadas en marzo de 2022, el 16,1% siguieron vivas un año después, más que el porcentaje del mismo periodo de 2017 y 2018, el 11%. Esta mejora de la supervivencia se produce a pesar de que los contratos indefinidos duran menos: el 48,5% de las relaciones laborales indefinidas iniciadas en marzo de 2022 permanecían vivas un año después, mientras que este porcentaje era del 52,5% en los otros dos años analizados.

Según explica el director general de Economía y Estadística, Ángel Gavilán, esto se debe a que al restringirse tanto la contratación temporal hay relaciones laborales indefinidas que no resultan satisfactorias y terminan en poco tiempo, situación para la que las empresas antes usaban un contrato temporal. “Una parte de ellas decaen como decaían antes los temporales”, explica, por ello han aumentado también las bajas en los periodos de prueba y los despidos de trabajadores indefinidos.

Te puede interesar: Trabajo reconoce usos incorrectos en las contrataciones de fijos discontinuos y sugiere mejorar su regulación

El informe apunta además que en comparación europea “existe margen para aumentar la estabilidad del empleo” porque los flujos de salida del empleo al desempleo siguen siendo mayores en España (2,8% en los tres primeros trimestres de 2023) que en la Unión Económica y Monetaria (1,2%), aunque se han reducido respecto a 2019 (cuando eran un 3,3%). Durante la presentación del informe, Gavilán ha señalado al respecto que “las dinámicas del empleo no han cambiado” y Juan Francisco Jimeno, coordinador del capítulo de empleo, ha añadido que “claramente, en los fijos discontinuos es donde hay mucho margen de mejora”. Por ello, ha instado al Gobierno a analizar si es necesario regularlos más.

Respecto a este último asunto, el Banco de España ha citado el informe de Fedea presentado hace una semana en el que se señalaba que las empresas estaban reproduciendo en parte la temporalidad con los contratos fijos discontinuos. Esta conclusión se extraía del hecho de que en 2022 aumentaran más las personas inactivas bajo la figura del fijo discontinuo que las activas y las afiliadas. Hace unos meses, un asesor del Ministerio de Trabajo y ahora diputado por Sumar (José Manuel Lago) reconoció en un encuentro en el Consejo General de Economistas que el uso de este tipo de contrato es “con gran probabilidad” incorrecto en algunas actividades como la educación y la hostelería. En esta línea, afirmó que “el Gobierno tiene que mejorar la norma” para evitar esos casos, pero el ministerio de Díaz se niega ahora a admitir fallos.

Post en X de Joaquín Pérez Rey, secretario de Estado de Trabajo.
Post en X de Joaquín Pérez Rey, secretario de Estado de Trabajo.

Por otra parte, la elevada rotación en la contratación y la caída en la supervivencia de los contratos indefinidos también podrían estar relacionadas con cambios de empleo de trabajadores para conseguir subidas salariales, ascensos o mejores condiciones laborales. Una nota al pie del Informe Anual menciona que el 80% de los trabajadores que iniciaron una relación laboral en marzo de 2022 seguían empleados un año después, ya sea en las empresas con las que formalizaron dichas relaciones o en otras distintas. “Esta probabilidad es ligeramente superior a la que se observa para los trabajadores que firmaron sus contratos en marzo de 2017 y de 2018, un 79,2% en promedio”, señala. El mercado laboral está más tensionado que en el periodo expansivo anterior, lo que hace más frecuentes estas estrategias

Más percepción de estabilidad

Aunque la reforma no haya acabado con la inestabilidad ni solucionado todos los problemas estructurales del mercado laboral español (el más claro que persiste es la elevada tasa de paro) sí ha conseguido mejorar la percepción de los trabajadores sobre su propia situación y eso implica más consumo y un impulso a la economía. Tener un trabajo indefinido genera expectativas de gasto al percibir mayor seguridad en los ingresos y rebaja el miedo a perder el empleo.

Te puede interesar: Los cinco motivos por los que España crece más que la UE: del boom del empleo al auge en el consumo de servicios

Según un informe de Kantar al inicio de 2024, el 87% de los encuestados afirmó tener poca o ninguna posibilidad de perder su empleo en los próximos seis meses y en la misma línea apuntan otras fuentes como la encuesta Consumer Expectations del BCE. Además, el Banco de España sostuvo en un informe de 2023 que la conversión de un contrato temporal en indefinido en 2022 conllevó un incremento de la ratio de gasto sobre renta “entre 0,18 y 0,24 puntos porcentuales”. Esto se traduce en que el gasto habría aumentado entre 1.846 y 2.462 euros anuales en los hogares cuya cabeza de familia firmó un contrato indefinido.

Guardar