Qué significan cada uno de los estados por los que pasa la declaración de la Renta

Al presentar el borrador de la declaración de la Renta, los contribuyentes deben esperar a la decisión final de la Agencia Tributaria. En este sentido, esta última deberá llevar a cabo una serie de trámites para culminar la confirmación del reembolso o la activación de las órdenes de pago.

Ahora bien, este no es un proceso simple, la resolución del Impuesto sobre las Personas Físicas (IRPF) deberá atravesar varios estados hasta llegar a la resolución final.

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Esto es lo que significa cada uno de los estados de la declaración de la Renta:

• En trámite: Este es el primer estado que puede ver un contribuyente una vez presenta la declaración de la Renta. Cuando aparece el mensaje “su declaración se está tramitando”, indica que la presentación del borrador se ha realizado correctamente y que los funcionarios de Hacienda han comenzado a revisarla.
• Comprobación del borrador: Cuando aparece el mensaje de “su declaración está siendo comprobada”, quiere decir que los técnicos ya están llevando la revisión de la misma. Es en este punto cuando, si surge algún problema, ya sea por un error de información o por un error de tramitación, el contribuyente puede encontrarse el mensaje de “la declaración con el importe indicado no ha sido grabada o está en proceso. Compruebe el importe”. En este caso, lo más recomendable es contactar con el personal experto.
• La devolución está siendo comprobada: Este estado podría sugerir la presencia de obligaciones pendientes. A pesar de la precisión de los datos, Hacienda podría haber detectado deudas con entidades gubernamentales, tales como multas de tráfico o embargos. En consecuencia, se llevará a cabo una revisión exhaustiva de la deuda.
• Tramitada: En aquellos casos en los que no se encuentre ningún fallo, la declaración llegará al estado de “tramitada” acompañada del mensaje “su declaración ha sido tramitada por los órganos de Gestión Tributaria”. En Aquí cuando Hacienda emitirá el reembolso o la orden de pago.
• No conforme: En caso de discrepancia entre la información declarada y los registros de la Agencia Tributaria, se enviará un requerimiento para verificar los datos. En tal situación, el contribuyente estará obligado a responder a las solicitudes de información adicional.
• Devolución emitida: Este estado marca el fin del proceso. En este punto la Agencia Tributaria procederá a emitir la devolución junto con la fecha correspondiente de emisión.

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Aquellos contribuyentes a los que la declaración de la Renta les salga a devolver recibirán un reembolso por parte de la Agencia Tributaria. Sin embargo, es importante tener presente que esta última cuenta con un período de seis meses para realizar dicho pago, iniciándose este plazo el último día de la campaña de presentación de declaraciones, es decir, el 1 de julio.

A pesar de este lapso máximo, la mayoría de los contribuyentes recibirán su reembolso
sólo unos días después de haber presentado la declaración, sobre todo aquellos cuyas declaraciones sean sencillas o se presenten en los primeros días de la campaña fiscal.

En caso de que transcurran los seis meses sin que se haya efectuado el reembolso, los contribuyentes recibirán, junto con el pago pendiente, un interés de demora, que se aplicará automáticamente sin necesidad de realizar una reclamación.