Los reyes Felipe y Letizia ya están en los Países Bajos, donde tiene lugar uno de los compromisos más esperados del año, su primer viaje de Estado de 2024. Como en todas estas visitas, el objetivo principal es poner de relieve y reforzar los lazos y las relaciones bilaterales entre ambos países, pero también sirve para que estrechen lazos con sus homólogos holandeses.
Para aprovechar al máximo el viaje sus agendas están llenas de compromisos más que importantes entre los que sobresale uno muy destacado: la cena de gala. Letizia siempre destaca en este tipo de actos gracias a su estilismo, pues se esfuerza al máximo para sorprender a asistentes y prensa luciendo vestidos impresionantes que conjuga con las piezas y tiaras del joyero real. A falta de saber qué llevará, repasamos algunos de sus looks más recordados.
Su vestido más usado
Letizia cerró el pasado 2023 con uno de sus mejores looks durante la cena de gala que la reina Margarita de Dinamarca ofreció en el palacio de Christiansborg con motivo de la visita que hizo al país junto al rey Felipe. Para esta ocasión se decantó por uno de los trajes de gala que más ha usado, una pieza de Felipe Varela que estrenó en 2015 que no pasa de moda. Con cuerpo ajustado, tirantes anchos y una falda gran con vuelo, es de color azul noche y está decorado con hojas florales en diferentes tonalidades de añil.
Lo conjugó con la tiara flor de lis, creada en 1609 por la joyería Ansorena, de motivos vegetales y coronada con una flor de lis, emblema de los Borbón. Está creada con brillantes con charnelas y platino.
De rojo Carolina Herrera
La visita que el presidente de Colombia, Gustavo Petro, realizó a Madrid en mayo de 2023 tuvo su punto álgido en una cena de gala que se celebró en el Palacio Real de la capital. Para la ocasión la reina optó por uno de los colores que mejor le sientan, el rojo, y llevó un vestido de Carolina Herrera tan sencillo como elegante.
De todas las piezas del joyero real se decantó por la tiara floral Mellerio, llamada así en honor al joyero francés que la creó en el año 1867. Llegó a la Casa Real española de manos del dictador Francisco Franco, que se la regaló a la reina Sofía con motivo de su boda con Juan Carlos I y en nombre del pueblo español. Destaca por su polivalencia, pues es una tiara compuesta por cinco flores que se desmontan y se pueden convertir en diferentes joyas, desde un collar hasta broches.
De rosa chicle en Japón
En 2019 los reyes de España viajaron a Japón para asistir a la entronización de Naruhito, el 126º emperador nipón. Una ocasión única en la que Letizia sobresalió gracias a un vestido tan llamativo como original de rosa chicle. Decorado con bordados florales en blanco en la parte frontal, era un diseño de Carolina Herrera que destacaba por tener un cuerpo ajustado y una falda amplia.
En cuanto a los complementos, se puso la tiara flor de lis, unos pendientes de diamantes talla orla montados en forma de garra y las pulseras gemelas de Cartier.
La tiara rusa
La visita del presidente de China a Madrid, en 2018, volvió a vestir de gala el Palacio Real de Madrid y es que los reyes ofrecieron una cena de honor a Xi Jinping, y su mujer, Peng Liyuan. En esta ocasión, Letizia salió de su círculo de confort al apostar por un vestido negro y sobrio, ajustado, con cuello cerrado y manga larga que la hizo brillar.
Creado por Felipe Varela, logró todas las miradas al conjugarlo con las pulseras Gemelas de Cartier, los pendientes de chatones del joyero real y la tiara rusa. Esta joya fue creada para la madre de Alfonso XIII, la regente María Cristina, y está inspirada en los tocados rusos, de ahí su nombre. Está realizada en diamantes, platino y perlas y es una de las más espectaculares de la colección real.
Un ‘look’ romántico
Con motivo de la visita del presidente de Perú a Madrid, en febrero de 2019, se abrieron las puertas del Palacio Real y, una vez más, Letizia brilló. Para esta ocasión reutilizó un romántico vestido que llevó en la preboda de los príncipes de Gales, un traje de color malva, cuerpo ajustado y falda con volumen que estaba decorado con bordados florales a juego.
Para continuar con estilismo floral se decantó por la tiara floral Mellerio, que combinaba a la perfección con un recogido bajo. Además, llevó los pendientes de su boda con Felipe y una de las pulseras gemelas de Cartier.