Una yegua muere en Sevilla tras sufrir un infarto en plena Feria de Abril con una temperatura de 30 grados

Una yegua falleció el pasado domingo durante el paseo de caballos de la Feria de Abril de Sevilla, que se realiza durante toda la jornada, hasta las 20.00 hora local, por las calles del recinto ferial, un hecho denunciado por el partido animalista PACMA ante el Ayuntamiento y la Guardia Civil. “Esta mañana denunciaremos al Ayuntamiento de Sevilla y al Seprona para que pongan en marcha una investigación para esclarecer la muerte de este caballo y que se tomen medidas para evitar más muerte en la feria”, anunciaban entonces desde el partido animalista.

Según han informado fuentes del Ayuntamiento, el animal, que tiraba de un coche de caballos entre las calles Chicuelo y Juan Belmonte junto a otro équido, se desplomó sin que se pudiera hacer nada por salvar su vida. La yegua, según el Consistorio, sufrió un infarto mientras realizaba el recorrido en un día con una temperatura de unos 30 grados.

El PACMA ha pedido en una nota que se investigue esta muerte y ha reclamado al Ayuntamiento que tome medidas para evitar más muerte de caballos durante la feria. Este partido asegura que al menos otro caballo se desplomó durante la primera jornada de la Feria, durante el domingo, y necesitó atención veterinaria, cuidados y descanso urgente.

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No se trata de excepciones, en este tipo de eventos y de ferias donde se utilizan a estos animales para tirar de carros a pesar de las altas temperaturas, la imagen que se repite cada año. El año pasado, se registró la muerte de otros tres caballos durante esta festividad de la capital hispalense. Dos de ellos fallecieron a causa de un incendio en las cuadras junto al Recinto Ferial en Sevilla y el tercero falleció mientras tiraba de un carro a pleno sol a 36 grados, según denunciaba entonces PACMA. En 2022, también denunciaron la muerte de otro corcel.

El Artículo 65, que se refiere a “Romerías, eventos feriados, belenes, cabalgatas y procesiones” en la Ley de protección de los derechos y el bienestar de los animales aprobada el año pasado establece que “los animales que se utilicen en romerías y eventos feriados deben presentar un estado higiénico-sanitario óptimo y tener garantizados durante el transcurso de la actividad unos niveles óptimos de bienestar animal atendiendo a las necesidades propias de cada especie y a las condiciones ambientales que existan en ese momento. Mientras se desarrolle la actividad, se deberá velar por que los animales que forman parte de ella se encuentren en buenas condiciones físicas, atendiendo entre otras cosas a indicadores comportamentales del animal o a signos que puedan evidenciar la necesidad de descanso, en particular en los meses de altas temperaturas”.

El artículo también contempla que “se prohíbe el uso de animales en romerías y eventos feriados cuando se identifique un exceso de temperaturas” y el domingo, en la ciudad de Sevilla se registró una temperatura máxima de 30,8ºC según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), es decir, unos cinco grados por encima de lo normal.

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La ley también establece que una conducta o actuación que derive en someter a los animales a un “trato negligente o cualquier práctica que les pueda producir sufrimientos, daños físicos o psicológicos u ocasionar su muerte” supone una infracción muy grave con una multa que puede ir de los 50.000 a los 200.000 euros.