El nuevo método de la DGT para vigilar las carreteras en verano: habrá “motos camufladas”

Además, el organismo prohibirá circular por el carril de la izquierda cuando haya fuertes nevadas, adelantó su director, Pere Navarro, a ‘El País’

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Atasco en la autovía A-4
Atasco en la autovía A-4 con motivo de la operación salida de agosto de 2023. (Alejandro Martínez Vélez/Europa Press)

La Dirección General de Tráfico (DGT) vela por nuestra seguridad en las carreteras españolas y es por esto que no deja de trabajar en implementar todas las tecnologías capaces de detectar las infracciones, responsables de buen número de los accidentes. La última novedad la ha revelado el propio director del organismo, Pere Navarro, en una entrevista concedida a El País: “En verano habrá motos camufladas patrullando por las carreteras”, declara.

En los días transcurridos desde el inicio de la Semana Santa a efectos de tráfico, desde las 15:00 horas del pasado viernes, y hasta las 20:00 horas de este Miércoles Santo, 15 personas han fallecido, reportan los datos oficiales registrados. Este miércoles por la tarde comenzó la segunda fase, en la que se prevé un volumen de 9,6 millones de desplazamientos. Ya en esa tarde se produjo un accidente mortal en el que una persona perdió la vida y otras dos resultaron heridas.

Para esta Semana Santa, como para las campañas especiales del verano, la DGT despliega todo su ‘arsenal’ técnico y humano para salvar vidas. También mediático, con spots de concienciación en ocasiones de gran dureza. El organismo ha dispuesto en las carreteras radares fijos y móviles de control de velocidad, helicópteros, drones, cámaras y furgonetas camufladas para controlar el uso del móvil y del cinturón de seguridad.

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“Acabar con las animaladas”

En verano, habrá un cambio más, como mencionó Navarro a El País. Esta fue su respuesta íntegra: “Habrá motos camufladas patrullando por las carreteras, de forma que el motorista que está al lado de otro puede ser un guardia civil. Sucederá sobre todo los fines de semana para aquellas zonas más conflictivas, de forma que acabemos con las animaladas”.

Navarro reconoce el objetivo prioritario de reducir la siniestralidad de los motoristas, con un perfil bien definido de accidente y conductor: “Tres de cada cuatro son en carretera secundaria, más de la mitad son en fin de semana, en motos de alta cilindrada y por salidas de la vía. El conductor tipo tiene entre 40 y 54 años, con 10 años de antigüedad en el carné de conducir”.

Cambios cuando haya nevadas

Pero no fue el único anuncio del director, que anticipó otro cambio de cara a la llegada del frío a nuestro país: “La segunda medida es más para el invierno. Cuando haya nevadas, se prohibirá el circular o estar en el carril de la izquierda, de forma que puedan circular las quitanieves echando sal o los servicios de emergencia”.

La DGT invertirá 975.000 euros en 15 radares móviles capaces de multar hasta en seis carriles.

Navarro celebra que los radares “han supuesto una inmensa reducción de las velocidades medias”. “Sigue habiendo pequeñas infracciones por exceso de velocidad -añade-, pero ahora, eso de que alguien te adelante absolutamente zumbado es cosa del pasado. Ahora eso de ir a alta velocidad tiene una cierta condena social”.

En este sentido, informa de que este 2024 terminará con 88 radares más. Con todo, admite, “si comparamos con Europa, tenemos pocos, aunque no es solo una cuestión de cantidad”. “Hemos hecho -concluye- una instrucción que dice lo que hay que tener en cuenta, con unas fórmulas, para saber dónde instalarlo como sitios en los que ha habido siniestros motivados por la velocidad. Históricamente, se han instalado donde se podía. Ahora se puede hacer donde se crea conveniente”.

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