¿Convertirse en un nugget de pollo? Todo es posible en la serie más bizarra de Netflix

Dicen que a las chicas de verdad les gusta el pollo frito, pero en el caso de la ficción coreana que ha aterrizado recientemente en Netflix, la predilección por dicho plato parece estar más que justificada. El universo audiovisual ha entrado en el plano de lo absurdo, un escenario que deja a la inteligencia artificial a la altura del betún, pues seguramente ni la mejor tecnología sea capaz de dar con un guion a su altura.

Nugget de pollo es una ficción que resulta imposible de explicar al ajeno. La serie surcoreana aterrizó en la plataforma hace unos días con una clara premisa: celebrar el ritual de lo absurdo a través de la comedia. En ella, una mujer que toca unos botones que no debería (un clásico en todas las grandes historias audiovisuales de aventuras) se transforma en el plato estrella de las grandes cadenas de restauración rápida.

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Sí, has leído bien. Se convierte en un nugget de pollo, en una tira de carne frita que cambia por completo su estado físico. La serie surcoreana, escrita y dirigida por Lee Byeong-heon (basada en el homónimo webtoon de Park Ji-dok, una página de cómics online, una suerte de Wattpad del género), cuenta la historia de Choi Min-ah (Kim Yoo-jung), la hija del presidente de una empresa que confunde una misteriosa máquina con un dispositivo que promete ayudarla con su acuciante fatiga.

Un, dos, tres, ¡bum! Cuando cree que ha entrado en un estado mental de relajación suprema a causa de los efectos de la melatonina y las flores de Bach, Choi Min-ah se percata de que, en realidad, se ha transformado en un nugget de pollo (dakgangjeongs en coreano). Mientras, su padre Choi Sun-man (Ryu Seung-ryong) y un trabajador de su empresa ‘Máquinas y más’ que está enamorado de ella, Ko Baek-joong (Ahn Jae-hong), harán todo lo que esté en sus manos para devolverla a su estado humano. En el camino, sin embargo, descubrirán más de un secreto y se toparán con científicos locos, leyendas ancestrales y civilizaciones de otros mundos.

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La ficción de Lee Byeong-heon respira comedia por todos sus costados. Es bizarra y absurda, tan loca que la primera reacción puede ser de rechazo absoluto, de ahí que pueda no apelar a todo tipo de audiencias. Eso sí, es una experiencia audiovisual única. “¿Cómo es la vida de un nugget de pollo? ¿Qué es más duro, ser un nugget de pollo durante 5 días o un humano durante 50 años?”, entona la comedia en su primer episodio.

Nugget de pollo va más allá de su premisa estrella, pues presenta a unos carismáticos y bondadosos personajes que se ganarán a los espectadores con su nobleza e inocencia. Además, sus enrevesadas teorías y tramas recuerdan al mejor Christopher Nolan, siempre obsesionado con las paradojas temporales y los vaivenes universales que repercuten en la cotidianidad. Así, la ficción no teme en registrarse en la categoría de la ciencia ficción más fantástica.

No es la primera vez que su creador presenta una trama audiovisual en la que subyace una cierta obsesión por el plato de comida rápida que pedíamos de pequeños para recibir, a cambio, un juguete que nos acompañaría durante el resto del mes. Otro proyecto del surcoreano que está disponible en streaming es Trabajo extremo (2019), la película de Prime Video en la que un comando policial antidroga monta un restaurante de pollo frito como tapadera para la investigación que están llevando a cabo. Sin embargo, la receta es tan deliciosa y tiene tanto éxito entre el público que complica su operación.

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