Collboni salvará las cuentas de Barcelona, pero sin la confianza del Pleno. El alcalde socialista de Barcelona se ha visto empujado a una cuestión de confianza vinculada a los presupuestos en el Pleno Municipal tras la votación del pasado viernes, cuando Barcelona en Comú se retiró del acuerdo agotándose la prórroga para sacar adelante 650 millones de euros. Con todo esto, el líder del PSC en Barcelona se queda únicamente con el apoyo del ERC y confirma la ruptura con la formación que lidera Ada Colau.
La votación, que ha sido llevada a cabo de manera nominal -en voz alta- no ha otorgado finalmente la confianza al socialista, con únicamente 15 votos y el rechazo de los concejales de BComú, Junts, PP y Vox, que han sumado 24 (han faltado dos concejales). Sin embargo, ante la imposibilidad de la oposición para impulsar una moción de censura y proponer un candidato alternativo a Collboni, el socialista salvará las cuentas de manera automática el 2 de mayo.
Te puede interesar: Collboni se somete a una cuestión de confianza para aprobar el presupuesto de Barcelona
En este sentido, el líder del PP, Daniel Sirera, ha señalado que, para el gobierno de Collboni, el pleno de este miércoles es un trámite para aprobar las cuentas. el dirigente popular ha lamentado que Barcelona “no se merece aprobar los Presupuestos por la puerta de atrás”.
El PSC gobierna en minoría en Barcelona con 10 de 41 concejales y solo ha llegado a un acuerdo presupuestario con ERC, que tiene cinco, mientras que TriasxBarcelona-Junts, Barcelona en Comú, PP y Vox, que se reparten los 26 restantes que votaron ‘no’ a la propuesta de cuentas.
Te puede interesar: El pleno del Ayuntamiento de Barcelona tumba el primer presupuesto del alcalde Collboni
Collboni abre la puerta a ampliar su gobierno
La oposición tiene ahora un plazo de un mes (30 días hábiles) para presentar una moción de censura con un candidato alternativo al alcalde que cuente con un apoyo suficiente. Si esto no sucede, como se prevé, se entenderá otorgada la confianza al alcalde Collboni y aprobado el proyecto de presupuesto del gobierno socialista para 2024, en la primera semana de la campaña electoral catalana.
El alcalde socialista no es el primer edil que recurre a este mecanismo para aprobar las cuentas sin tener los apoyos suficientes: la última fue la exalcaldesa y líder de BComú, Ada Colau, que lo hizo dos años consecutivos durante su primer mandato (el máximo de veces permitidas), en 2017 y 2018.
El exalcalde y líder de Junts, Xavier Trias, también planteó este procedimiento en noviembre de 2013, cuando el pleno municipal no apoyó su propuesta de presupuestos para 2014, que quedó aprobada de manera automática 30 días después.
Ahora el alcalde tiene por delante un periodo de mandato de tres años al que se le suma la dificultad de gobernar en minoría. Consciente de ello, Collboni ha anunciado que ampliará su gobierno y se embarca en la búsqueda de nuevos pactos. Hasta el momento, ERC es la única formación con la que los socialistas han mostrado reciente sintonía y con quien se ha postulado como claro aliado en la votación de los presupuestos -a día de hoy solo en eso-, por lo que es muy seguro que el acuerdo pase por ellos primero.
“Soy un alcalde progresista, con un gobierno progresista, que hará política progresista”, ha reiterado, y ha matizado de nuevo que esto no excluye llegar a acuerdos con otros grupos.
La primera teniente de alcalde, Laia Bonet, ha reprochado al líder de Junts y exalcalde, Xavier Trias, y a la de BComú y exalcaldesa, Ada Colau, que no hayan centrado su intervención en hablar de la ciudad, y ha avisado: “Barcelona no se para y no dejamos ni queremos dejar que la bloqueen con la actitud de algunos grupos”.
Sin embargo, los republicanos y socialistas tienen cada vez más diferencias con los comunes , por lo que será necesario esperar algunos meses y largas negociaciones para reforzar el gobierno, especialmente en vísperas electorales en Cataluña.