Cómo funciona VioGén, el sistema de protección de las víctimas de violencia de género

España ha perdido este 2024 a seis mujeres que fueron asesinadas a manos de sus parejas o exparejas. Este mismo martes, la Policía Nacional investiga un séptimo caso como supuesto crimen machista, tras encontrar a una mujer muerta en su domicilio en Ribeiro (A Coruña). En total, el país arrastra 1.246 mujeres víctimas de violencia de género desde 2003.

Entre los mecanismos que buscan frenar esta lacra, esta VioGén. Se trata del Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género y lleva en funcionamiento desde 2007. Esta herramienta pone en coordinación a diferentes instituciones públicas para mejorar la atención y protección de las víctimas. Los datos actualizados a febrero de 2024 muestran que este sistema realiza actualmente un seguimiento de 794.273 casos de violencia de género.

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El 016 atiende a todas las víctimas de violencia machista las 24 horas del día y en 53 idiomas diferentes, al igual que el correo 016-online@igualdad.gob.es; también se presta atención mediante WhatsApp a través del número 600000016, y los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10.

El proceso de VioGén comienza siempre con una denuncia, ya sea de la propia víctima o por alguien de su entorno. Incluso un atestado policial puede dar inicio a la protección. Según explicaba la responsable de violencia de género en el Ministerio del Interior, María Jesús Cantos, en una entrevista con RTVE, “en primer lugar se le pide un relato libre y se genera confianza en la mujer para que pueda contarnos todo lo que ha pasado”.

El segundo paso consiste en responder una serie de preguntas sobre las agresiones sufridas, la situación de la víctima y de sus hijos si los tiene, el perfil del agresor y los agravantes de vulnerabilidad presentes en el caso, como, por ejemplo, la dependencia económica de la pareja o expareja. El objetivo es detectar el riesgo de reincidencia del maltratador y el riesgo de homicidio. Con todos los datos barajados, los profesionales establecen un nivel de riesgo que siempre irá al alza, nunca puede bajarse.

Existen cinco niveles de riesgo en VioGén: extremo, alto, medio, bajo y no apreciado. Cada grado implica una serie de medidas de protección. En los casos de menor amenaza, los agentes dan información a la víctima de los recursos judiciales y sociales que existen para ayudarla, además de ofrecer recomendaciones de autoprotección. También se le facilitan a la víctima números de teléfono de contacto 24 horas con las fuerzas de seguridad que tengan asignado el caso. En niveles más elevados, puede trasladarse a la víctima a un centro de acogida y se realizarían controles ocasionales en el domicilio y lugar de trabajo de la mujer, así como del centro escolar de sus hijos menores si los tiene. El agresor, por su parte, llevará un dispositivo telemático de control y deberá cumplir las medidas judiciales impuestas.

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En los casos de mayor riesgo, se trasladará a la víctima de domicilio si el agresor no está localizado, además de controles frecuentes y aleatorios de su domicilio y centro de trabajo. Se impondrá un control también de los movimientos del agresor y sus contactos con personas cercanas. En el caso extremo, se haría un control intensivo del agresor hasta que deje de ser una amenaza inminente para su seguridad.

El sistema no siempre es efectivo: en 2023, casi 10.000 víctimas de violencia machista que se encontraban en el VioGén en 2023 fueron agredidas de nuevo o se rompió una medida de protección. “De los 59.950 casos registrados en el sistema VioGén en el año 2023, en 9.429 casos ha vuelto a existir una nueva denuncia, ya sea por parte de la víctima o de oficio”, explicó el Gobierno tras una consulta del grupo parlamentario del Partido Popular.

Para intentar amparar los cientos de miles de casos de forma efectiva, el proyecto se somete a modificaciones cada cierto tiempo. Desde el año 2007, inicio del VioGén, ha habido cinco modificaciones. El pasado mes de febrero, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunció que se realizará una revisión de los criterios y procedimientos de inactivación de casos. Además, se trabaja para que el sistema evolucione y amplíe sus funciones actuales para facilitar el seguimiento integral frente a la violencia machista. “Son evidentes los avances que hemos conseguido contra la violencia de género, pero el reto evoluciona y su persistencia nos exige un compromiso permanente con las nuevas derivas que presenta esta compleja problemática”, aseguró Marlaska.