Si hay algo que se le da bien a Guy Rtichie, eso es las historias de mafia. Pero no una mafia cualquiera, ni siquiera la italiana que tan bien ha representado en el cine grandes maestros como Martin Scorsese o Francis Ford Coppola. Ritchie está especializado en el hampa británica, aquel colectivo al que lleva retratando desde hace más de 25 años y al que hasta ahora no ha dado nunca la espalda. De hecho, las mejores producciones del cineasta siempre han salido de aquí y normalmente ha tenido peor fortuna precisamente cuando se ha apartado de los criminales de poca monta. Con todo esto en mente, a nadie se le podía escapar que The Gentlemen, su nueva serie, iba a ser todo un éxito.
Para estudiar el caso de esta producción que ha llegado a Netflix hace tan solo unos días, primero hay que tener en cuenta su precedente directo, The Gentlemen: Los señores de la mafia, la película basada en el mismo universo y con la que Ritchie triunfó hace unos años. Y eso que tuvo un estreno algo accidentado, pues a nuestro país llegó un poco más tarde y cuando estaba empezando a arrasar en taquilla se produjo el estallido de la pandemia, obligando a todos los cines a cerrar y condenando la película a esperar una segunda oportunidad en el streaming. Así fue y el filme protagonizado por Matthew McConaughey, Hugh Grant, Colin Farrell o Charlie Hunnam entre otros no defraudó en su segundo intento, convirtiéndose en uno de los títulos más vistos durante el COVID-19.
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Aquella película contaba la historia de Mickey Pearson (McConaughey), un capo de la droga de origen estadounidense que buscaba retirarse vendiendo su imperio de marihuana. En Inglaterra parece haber encontrado vendedor, pero sin saberlo se meterá en una guerra abierta entre varias bandas que ansían hacerse con el control del mercado, un pequeño gran detective y un entrenador de boxeo de poca monta. Traiciones y complots, sobornos y chantajes, tiroteos y peleas cuerpo a cuerpo se desatarán en Londres mientras Mickey intenta poner en orden sus posesiones y no morir en el intento. Con una historia tan trepidante y personajes tan carismáticos, solo era cuestión de tiempo que un universo así terminase expandiéndose, y eso es lo ha sucedido con The Gentlemen en Netflix.
Los nuevos señores de la mafia
Porque, ambientada en el mismo universo de los bajos fondos british, pero cambiando por completo el reparto, el pasado día 7 llegaba a la plataforma The Gentlemen, la serie que funciona como spin-off de la película de 2019. En esta ocasión el protagonista no es un estadounidense repatriado como el Mickey Pearson de Matthew McCaonaughey, sino el Eddie Horniman de Theo James, a quien ya hemos visto en sagas como Divergente y series de éxito reciente como The White Lotus. En The Gentlemen, el joven Eddie hereda inesperadamente la enorme finca que era propiedad de su fallecido padre, pero con ella descubre también que formaba parte de un gran imperio del cannabis dentro del Reino Unido. Para colmo, al joven le informan de que con la muerte de su padre media Inglaterra quiere hacerse con el negocio, y la otra media directamente quiere acabar con su linaje. Eddie tendrá que proteger a su familia al tiempo que se hace a manejar el negocio que su padre le ocultó y al que ahora no le queda otra si quiere sobrevivir en un mar lleno de tiburones.
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Además de Theo James como protagonista, la serie cuenta con un reparto lleno de caras conocidas, desde Ray Winstone como Bobby Glass, el jefe de un imperio criminal de cannabis a Kaya Scodelario (Skins) como Susie, hija de Bobby; Daniel Ings (Sex Education) como Freddy Horniman, hermano de Eddie, el exfutbolista y todo un clásico en el cine de Guy Ritchie como Vinnie Jones o Giancarlo Esposito, quien tras dar vida a otro capo de la droga como el Gus Fring de Breaking Bad, aquí da vida a otro trafricante, el tío Stan. La serie cuenta con ocho episodios ya disponible en la plataforma y, aunque aun no ha confirmado oficialmente si habrá segunda temporada, el final abierto de la misma invita al optimismo. Al fin y al cabo, ¿qué otra cosa se le da mejor al bueno de Guy Ritchie?