Estas son los herederos con prioridad a la hora de recibir una herencia

Entender la prioridad en la recepción de herencias es una cuestión fundamental para muchas familias, especialmente ante la ausencia de un testamento. La legislación española, a través del Código Civil, estipula claramente la jerarquía de los herederos, así como los procedimientos a seguir para la división equitativa de los bienes. En este artículo, se abordarán las principales dudas respecto a quiénes son los herederos con prioridad y cómo se gestiona una herencia sin testamento.

La ley española establece que, en ausencia de testamento, la herencia se distribuye según un orden de sucesión hereditaria predefinido. Este orden determina que los primeros en la lista son los descendientes directos del fallecido, es decir, sus hijos.

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Los hijos del fallecido son los primeros en la línea de sucesión, heredando en partes iguales. Esto incluye tanto a los hijos biológicos como a los adoptados legalmente. En caso de que algún hijo haya fallecido antes que el progenitor, sus descendientes directos, es decir, los nietos del difunto, tienen derecho a recibir la porción que le habría correspondido a su progenitor.

En cambio, si el fallecido no deja descendencia, la herencia pasa a sus ascendientes más próximos, prioritariamente a los padres. En el caso de que uno de los padres haya precedido al fallecido, la porción correspondiente se transfiere íntegramente al padre sobreviviente. En ausencia de ambos, la ley contempla la sucesión por parte de los abuelos.

Asimismo, el cónyuge sobreviviente ocupa el tercer lugar en la orden de prelación. La ley le otorga la herencia únicamente en ausencia de descendientes y ascendientes directos. Es importante destacar que la situación matrimonial debe estar legalmente reconocida para que el cónyuge tenga este derecho. Por contra, si no existen herederos que se ajusten a los casos anteriores, la ley contempla a los hermanos y sobrinos como siguientes en la línea sucesoria. Este grupo solo entra en consideración bajo circunstancias muy particulares, dada la prioridad concedida a los parientes más directos.

Para reclamar una herencia sin testamento, los herederos deben iniciar un proceso de declaración de herederos abintestato, el cual varía ligeramente según el grupo al que pertenezcan. En el caso de hijos y padres, este trámite se realiza mayormente en una notaría, mientras que para los herederos de los grupos subsiguientes, puede requerirse la intervención de un juzgado.

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Es esencial contar con la asesoría de abogados especializados en herencias, los cuales facilitarán el proceso, desde la identificación de los herederos legítimos hasta la distribución efectiva de los bienes. Estos profesionales garantizan que los derechos de cada heredero sean debidamente representados y respetados, aliviando la carga emocional y burocrática que conlleva este tipo de procedimientos.

La gestión de una herencia requiere de ciertos documentos fundamentales, entre ellos el certificado de defunción, el certificado de últimas voluntades, y la declaración de herederos. Además, es probable que se necesiten dos testigos no familiares durante el trámite notarial.

Finalmente, aunque la pérdida de un ser querido es un momento difícil, es crucial abordar la cuestión de la herencia con claridad y prontitud. Acudir a profesionales calificados proporciona tranquilidad y asegura que el proceso se conduzca de manera justa y conforme a la ley, permitiendo que las familias se enfoquen en su duelo sin preocupaciones adicionales.