Lucía Dominguín se ha sincerado sobre cómo vivió la muerte de su hija Bimba, un tema sobre el que raramente habla en público. La hermana de Miguel Bosé ha concedido una entrevista en el programa No le mientas a Pinocchio en la que ha compartido reflexiones personales sobre la dura pérdida de su primogénita, que falleció en 2017 a causa de un cáncer.
En el espacio de YouTube, la pintora ha asegurado que “todas las pérdidas son duras, ninguna es natural”. Así, ha confesado que extraña mucho a sus padres, Lucía y Luis Miguel, así como a su hija Bimba. “Este año ha sido muy duro para mí”, agrega.
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“A mi hija le agradezco lo que me ha enseñado, el valor que me ha dado y la demostración de amor que me ha dado en el momento de irse”, ha expresado Dominguín, que relata cómo vivió la muerte de Bimba tras una larga lucha contra el cáncer: “Es muy fuerte, cómo te levantas por la mañana, pensar que uno de tus hijos se va, te mueres por dentro en todos los sentidos”.
Pese al sufrimiento, Lucía afirma que su fuerza para seguir adelante la encontró en sus otros tres hijos: Palito, Olfo y Jara. “Tengo otros hijos, ahora tengo un nieto nuevo que es divino, no me lo quiero perder. Hay que superar esa parte porque hay seres que te quieren y tienes que luchar por ellos. En España no sabemos vivir con la muerte”, reflexiona.
“La serie de Miguel no cuenta mi vida”
En esta conversación, la hija de Lucía Bosé también habla de otros aspectos de su vida, como la relación con su hermano Miguel. Y es que, aunque el cantante ha hecho un relato muy duro de su infancia y de la relación de sus padres, para ella el recuerdo es muy distinto: “La relación que tenían mi padre y mi madre ha sido dura, yo no me he enterado de la mitad de las cosas, pero si ha pasado algo tan duro como Miguel cuenta, es que él era el elegido, el primogénito, al que le contaban las cosas, mi madre se apoyaba en él”.
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“Mi hermana y yo vivimos lo mismo que él, pero cada uno lo vivimos de una forma, no es que lo suyo sea mentira o lo mío, cada uno pilla la situación de una manera”, añade la artista, que también se pronuncia sobre la serie de ficción y el documental que Miguel ha hecho sobre su vida: “Me gusta más el documental este que ha hecho, más que la serie, porque la serie no la puedo ver, lo reconozco. (...) Veo a mi madre representada por una persona que no es mi madre, con unos vestidos que no se ponía mi madre. Veo a mi padre tan déspota y tan machista, yo no lo he vivido así”, asevera.
“Está contando una vida, pero no es la mía, y yo no quiero. Tengo mis recuerdos y son bonitos”, ha dicho sobre la serie biográfica de su hermano. A pesar de ello, valora la capacidad que Miguel ha tenido para recopilar datos del pasado en este ejercicio de catarsis: “La cultura de mi hermano es alucinante, o sea yo me he perdido en mi vida y de la vida de mis padres la mitad, él la ha vivido y tiene una memoria histórica alucinante”.