Primera caída con Ducati, averías y el podio al alcance: así cierra Marc Márquez los test de pretemporada de MotoGP

El ilerdense se va acoplando a su Ducati, pero aún está lejos del bicampeón Bagnaia. “Era el último día de la pretemporada y tocaba sufrir esta caída”, asegura

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El español Marc Marquez, en un momento de la tercera jornada de entrenamientos oficiales de MotoGP en el circuito malasio de Sepang. EFE/EPA/FAZRY ISMAIL
El español Marc Marquez, en un momento de la tercera jornada de entrenamientos oficiales de MotoGP en el circuito malasio de Sepang. EFE/EPA/FAZRY ISMAIL

Marc Márquez impresionó a Ducati en particular y todo el paddock en general tras el primer test en Cheste con su nueva moto, allá a finales de noviembre “Esto es una mala noticia para nosotros, pero muy buena para el mundo de la moto”. Sirvan estas palabras del director deportivo del Prima Pramac Ducati, Gino Borsoi, para describir el pánico que transmitió Márquez en su primer día como piloto de Gresini, equipo satélite de Ducati. La conexión entre piloto y moto fue total desde el principio, tal como desvela Michele Pirro, piloto probador de la casa que estuvo presente en Cheste y pudo conversar con Marc.

“Como piloto de Ducati y como probador, que debe pasar información y sensaciones a los técnicos, claramente, me preocupé de pedirle cuáles eran las cosas que se podían mejorar… y, por el momento, el folio se quedó bastante blanco. Hay satisfacción por eso porque cuando llegué a Ducati éramos nosotros los que teníamos que copiar a los japoneses, mientras que ahora la situación es inversa”, explica. El piloto de pruebas se mostró satisfecho porque los tiempos marcados por el leridano demuestran que la Desmosedici es apta para todo tipo de estilos y competidores. “Lo positivo es que también Marc confirmó con sus tiempos que la Ducati es una moto versátil y que también de un piloto tan importante como él nos llegaron sensaciones positivas”, decía en gpone.com a la par que no se sorprendía por las buenas prestaciones del de Cervera.

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Averías iniciales, caída final y cerca de Bagnaia

Eso ocurrió cuando el frío invierno apretaba, ahora, dos meses después de aquello, el español está más acoplado a su nueva moto. Márquez acabó satisfecho su primera jornada de entrenamientos en Sepang, en el test de MotoGP, en la que acabó noveno. Eso sí, después de sufrir varios contratiempos, como averías al principio y una caída al final. Fue de menos a más. “Al final, había un poco de cachondeo dentro del box, porque ha habido muchos problemas. Dicen: ‘Todos los problemas que podían salir en el primer día, han salido en tus dos motos’”.

Marc Márquez avisa tras su exhibición con la Ducati: su gesto al pasar por meta lo dice todo.

“Y bueno, lo importante es que el equipo ha reaccionado muy bien. Sí que es verdad que esto me ha impedido coger ritmo, siempre parando en el box. Pero, al menos, por la tarde he podido hacer dos salidas medio normales y ahí ya pues me he ido encontrando mejor. Pero aún con mucho trabajo por hacer en mi lado para adaptarme yo a la moto y entender el tren delantero, sobre todo, que es lo que cambia más respecto a la Honda. Y empezar a probar cosas de puesta a punto, que de momento no lo hemos hecho”, añade.

La próxima vez que rujan los motores en parrilla será en carrera oficial, en Lusail entre el 8 y el 10 de marzo, primera prueba de las 22 de las que consta este año el Mundial. Después de las pruebas del lunes, de las que Marc Márquez salió bastante satisfecho, la jornada del martes comenzó con problemas mecánicos. Su Desmosedici GP23 se paró en la primera vuelta y tuvo que ser remolcado a su box (en Sepang ya sufrió cuatro averías). Pecco Bagnaia, el actual campeón, demostró que sigue siendo el favorito. Pulverizó todos los registros del circuito con un estratosférico 1:50.952, que mejoraba en ocho décimas el récord que ostentaba Luca Marini. Marc Márquez se acercó a ese crono, demostrando estar cada vez más cerca de los mejores y dando un salto importante en sus prestaciones a una vuelta.

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