Una trágica historia de dependencia y soledad de las personas mayores. Los servicios de emergencias hallaron el sábado pasado en un domicilio del madrileño barrio de Aluche los cadáveres, sin signos de violencia, de una mujer de 80 años y un hombre de 57. Se trataba de su madre y su hijo, a quienes los vecinos llevaban días sin ver. Alertados por un fuerte olor que desprendía la vivienda, se temieron lo peor y, al no recibir respuesta al otro lado de la puerta, llamaron al 112. Fue el sábado a las nueve menos cuarto de la mañana.
Hasta el domicilio, ubicado en la calle Ocaña del distrito de Latina de la capital, se desplazaron los bomberos del Ayuntamiento, según ha adelantado el diario ABC y han confirmado a Infobae España fuentes policiales y de Emergencias Madrid. Los bomberos forzaron la puerta de la vivienda y accedieron a su interior, donde comprobaron el fuerte olor característico de este tipo de sucesos.
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Nada más entrar, hallaron el cuerpo sin vida de un hombre de 57 años en la cocina. Aparentemente había sufrido un accidente doméstico al darse un golpe en la cabeza. Después, encontraron en la cama el cadáver de su madre, de 80 años, que sufría problemas cognitivos y de movilidad, por lo que era totalmente dependiente de su hijo. Los bomberos activaron a los sanitarios de Samur-Protección Civil, que certificaron ambos fallecimientos sin poder realizar ningún tipo de asistencia. Ambos estaban en avanzado estado de descomposición y llevaban varios días fallecidos.
Autopsia a los cadáveres
También se personaron en el domicilio, ante la atónita mirada de los vecinos, los agentes de la Policía Nacional, realizaron una rápida inspección ocular del escenario y comprobaron que los cuerpos de madre e hijo no presentaban signos de violencia. No obstante, la comisión judicial se desplazó hasta la vivienda para ordenar el levantamiento de los cadáveres, que posteriormente fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal, donde se les practicó la correspondiente autopsia que revelará, de forma oficial, las causas de ambas muertes.
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Según los primeros datos, la mujer era dependiente de su hijo y murió al no poder ser atendida durante varios días después de la muerte del varón. En España, hay un total de 1.415.578 personas dependientes, según datos de la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales publicados en 2022.
La Ley de Promoción de la Autonomía y Atención a las Personas en Situación de Dependencia define esta condición como “el estado de carácter permanente en que se encuentran las personas que, por razones derivadas de la edad, la enfermedad o la discapacidad, así como por motivos relacionados con la falta o a la pérdida de autonomía física, mental, intelectual y sensorial, precisan de la atención de otra u otras personas para realizar actividades básicas de la vida diaria”.