Una nueva carretera amenaza con partir el Parque Regional del Río Guadarrama en Colmenarejo (Madrid)

El Ayuntamiento de Colmenarejo (Madrid) estudia construir una nueva carretera que conecte el municipio con la autovía M-503. El objetivo, según compartió su alcalde, Fernando Juanas Cerrada, es descongestionar la salida de Colmenarejo por Galapagar, “además de asegurar una evacuación rápida al Hospital Puerta del Hierro”. Sin embargo, el proyecto ha puesto en alerta a la organización Ecologistas en Acción, que ha denunciado que la actuación afectará a tres vías pecuarias y los suelos protegidos del Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama.

El terreno está recogido dentro de la red ecológica europea Red Natura 2000, denuncia Ecologistas en Acción. Esta está enfocada en proteger hábitats naturales y especies de flora y fauna silvestres de interés comunitario. La organización considera que estas propuestas son “peligrosas para la salud de la ciudadanía y del medio natural”.

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El proyecto de Colmenarejo se estaría elaborando con el responsable de Vías Pecuarias, José Alberto Millán, y el Director General de Agricultura, Ganadería y Alimentación, Ángel de Oteo Mancebo.

Las vías pecuarias de la Comunidad de Madrid, antiguos caminos utilizados en el pastoreo, resisten acosadas por diversos peligros de difícil solución. El abandono de la trashumancia en la región ha abierto la puerta a ocupaciones de infraestructuras temporales y a los vertidos ilegales de material de obra o sustancias peligrosas. Aun así, son utilizadas por vecinos de la región como zonas naturales por las que pasear, montar en bici o hacer deporte. Además, tienen reconocida su función como corredores biológicos, es decir, espacios en los que se unen dos o más ecosistemas anteriormente desconectados por la actividad humana.

Por eso, para el portavoz y vocal de vías pecuarias de Ecologistas en Acción, Luis de Andrés, el nuevo proyecto de Colmenarejo supone “la liquidación definitiva de las vías pecuarias”. “Nos parece muy preocupante y más cuando se superponen dos elementos de protección”, denuncia De Andrés a Infobae España. Las vías pecuarias afectadas en este caso tienen la particularidad de que atraviesan una zona de especial conservación (ZEC): la Cuenca del Río Guadarrama.

En concreto, se trata del Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama. El terreno ocupa 22.116 hectáreas y atraviesa varios municipios del oeste de la Comunidad de Madrid, entre ellos Colmenarejo. La legislación madrileña insiste en que debe evitarse “la construcción de nuevas infraestructuras” en la zona.

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La norma abre paso a una excepción: en caso de que se construyan nuevas infraestructuras que afecten al parque, estas deben “aproximarse a las ya existentes”. Además, un reciente cambio de la Ley de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid permitiría el reasfaltado en los “tramos de Vías Pecuarias que hayan sido asfaltados con anterioridad” al 1998 y que “hayan perdido su funcionalidad en cuanto a la trashumancia”. De Andrés admite que en la zona “había una antigua infraestructura, un carril, del que quedan restos de asfalto”, lo que daría pie a la construcción de la carretera.

No obstante, De Andrés defiende que “hay una contradicción en la legislación vigente” y que afecta al proyecto. La normativa referida a las vías de interés natural y cultural establece que “serán declaradas de interés natural aquellas vías de la Red de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid o tramos de ellas que discurran dentro de los límites de los espacios naturales protegidos de la Comunidad”. Como el parque del Guadarrama que atraviesan estos tres caminos.

“Esa declaración implica un grado de protección aún mayor, pero no articulan ese catálogo de vías de interés natural”, comenta De Andrés. “La propia ley exige que estén declaradas como vías de interés natural”, insiste.

El proyecto de carretera aún debe recorrer un largo camino antes de empezar a construirse. Por el momento, Ecologistas en Acción ha solicitado más información a la Comunidad, pero no esperan respuesta. Mientras, el Ayuntamiento, que no ha respondido a las cuestiones planteadas por este medio, celebra los avances en las obras: “Sí hay salida”.