“Hacienda siempre cobra”, asegura con cierta sorna Santiago, de 72 años. Él es uno 3.173 vecinos que residen en el municipio madrileño de Cadalso de los Vidrios. Esta localidad, junto a las de Cenicientos y Rozas de Puerto Real, fueron en junio de 2019 tristes protagonistas de una tragedia sin precedentes en la zona: los montes y prados de sus términos municipales sufrieron el peor incendio en la comunidad de Madrid en lo que llevamos de siglo XXI: 2.187 hectáreas arrasadas por un fuego que comenzó el 28 de junio en Almorox, Toledo, y que estuvo activo doce días propagándose por los municipios madrileños limítrofes.
La Comunidad de Madrid prometió entonces volcarse con los afectados. “Es lo que viene tras este tipo de desgracias. El politiqueo”, señala Santiago, ya jubilado. Un mes después, en julio de 2019, el entonces presidente en funciones del Gobierno regional, Pedro Rollán (hoy presidente del Senado), anunciaba un paquete de ayudas por valor de cinco millones: no solo para retirar la madera quemada e iniciar trabajos de repoblación, sino también un programa de inversiones por valor de 1,5 millones para, por ejemplo, construir puntos limpios o adecentar escombreras.
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Santiago recibió una subvención para que limpiara la parcela de su propiedad que se había quemado, donde había algunas viñas, pinos, olivos y un pequeño huerto. Todo quedó destruido. En total, 0,82 hectáreas. Él no recibió directamente el dinero, sino que la Comunidad de Madrid tasó los daños y pagó a una empresa pública, Tragsa, para que hiciera los trabajos. Unos trabajos que se calcularon en 2.253 euros. La sorpresa le llegó al año siguiente, cuando Hacienda le hizo pagar 500 euros exactos en su declaración de la renta por la ayuda recibida, ya que él había sido el beneficiario. “No lo entendía. Pedimos explicaciones a Hacienda y a la Comunidad”, señala.
No lo hizo él. Los 72 años pesan mucho. Lo hizo su sobrino, Emilio, que también tenía una finca en Cadalso afectada por el incendio. “El técnico de Hacienda que nos atendió fue muy elocuente. Me vino a decir que la banca siempre gana, que Hacienda siempre cobra. De la Comunidad nunca obtuvimos una respuesta. Es decir, te queman una propiedad, y encima tienes que pagar al fisco”. Emilio iba en el siguiente paquete de ayudas. “El fuego me quemó 0,57 hectáreas. A mí me correspondía un poco más de ayuda que a mi tío, 2.770 euros. Renuncié a ella porque no quería pagar a Hacienda. Yo y mis hermanos hemos limpiado poco a poco nuestra parcela”, concluye.
La Comunidad de Madrid asegura que entre los años 2020 a 2023 firmó un total de 60 convenios con propietarios privados para ejecución de las labores de restauración de sus terrenos forestales afectados por el fuego, invirtiendo un total de 1.546.864 euros para una superficie de actuación de 334 hectáreas. Para el tema del pago a Hacienda a aquellos que recibieron esta ayuda tampoco hay respuesta. José Luis García, diputado socialista en la Asamblea de Madrid, asegura que tampoco hay respuesta para saber qué ha sido de los 1,5 millones en inversiones que en 2019 se prometieron para los tres pueblos madrileños afectados por el incendio: Cadalso de los Vidrios recibiría 954.000 euros, 500 euros por hectárea; Cenicientos unos 526.000 euros, 2.000 euros por hectárea; y Rozas de Puerto Real un total de 120.000 euros, 8.000 euros por hectárea.
Natalia Nuñez, alcaldesa socialista de Cenicientos cuando se produjo el incendio, hoy en la oposición, señala a este diario que el 62% del monte público del municipio se quemó en 2019. “Hemos recibido ayudas para trabajos de repoblación y para retirar la madera quemada, pero de la ayuda prometida para inversiones, nada de nada”. Igual denuncia la portavoz socialista de Cadalso, Ana Sibert. “Llevo cuatro años preguntando en el Ayuntamiento por esa ayuda que obviamente nunca hemos recibido”.
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La Comunidad de Madrid, en una respuesta parlamentaria fechada este mes de enero al diputado García, señala que hasta la fecha se ha destinado un total de 2.997.490 euros para la recuperación de los terrenos forestales afectados por el incendio de junio de 2019. De ellos, 1.450.626 euros se han destinado a la recuperación de los montes de utilidad pública mediante obras ejecutadas por la administración forestal y un total de 1.546.864 euros se han destinado a la recuperación de los terrenos forestales de propiedad privada mediante ayudas en especie de concesión directa.
Porque el incendio afectó a dos parajes incluidos en el Catálogo de Montes de Utilidad Pública de Madrid, el ‘Pinar del Concejo’, propiedad del Ayuntamiento de Cadalso de los Vidrios, con una superficie total de 858 hectáreas, de las que 116,78 ha fueron afectadas por el fuego (el 16%); y el monte ‘Albercas y Alberquillas’, propiedad del Ayuntamiento de Cenicientos, con una superficie total de 187 hectáreas, de las que 137,68 (el 62%) se quemaron.
Por la extensión y gravedad del incendio, en julio de 2019 la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio declaró el estado de emergencia para restaurar los daños ocasionados por este incendio en los tres municipios y se encargó a la empresa pública Tragsa la ejecución de los trabajos. Se invirtió un total de 597.444 euros en la retirada de madera quemada y labores de control de la erosión en estos montes de utilidad pública afectados. Por su parte, la Dirección General de Desarrollo Rural, Innovación y Política Forestal del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación invirtió otros 499.672 euros también en restaurar estos montes públicos.
Entre noviembre de 2022 y febrero 2023 la Comunidad de Madrid también llevó a cabo un proyecto de repoblación en estos montes de utilidad pública “con el fin de recuperar la cubierta arbolada. Se ha actuado en un total de 182 hectáreas de ambos montes, por un importe de 253.510 euros”. En cuanto a los propietarios privados, se recibieron 223 solicitudes de ayudas, de las que 149 se desestimaron por estar sus terrenos fuera del incendio, no acreditar la propiedad de los terrenos, no cumplir los requisitos necesarios para ser beneficiario de la subvención o por renuncia del solicitante, quedando finalmente 74 solicitudes que abarcaban unas 423 hectáreas. Finalmente, se firmaron 60 convenios.