Los policías nacionales, al alcanzar la edad de jubilación, reciben una pensión que se establece conforme a la Ley General de la Seguridad Social y otras normativas que rigen las prestaciones para los miembros de este cuerpo de seguridad al retirarse.
Actualmente, la edad de jubilación para los policías nacionales sigue las mismas pautas que para otros trabajadores: 65 años si han cotizado durante 37 años y nueve meses, y 66 años y cuatro meses para aquellos que no cumplen con este requisito. Sin embargo, la ley permite la jubilación anticipada para este grupo hasta cinco años antes de lo estipulado, siempre y cuando se cumplan ciertos requisitos establecidos por la Ley General de Seguridad Social.
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El monto de la pensión de un policía jubilado se encuentra especificado en la tabla de pensiones del Régimen de Clases Pasivas, la cual indica los años de servicio y el porcentaje correspondiente que regula la prestación.
De acuerdo con las tablas salariales del Régimen de Clases Pasivas, un policía nacional jubilado del grupo C1, con 35 años o más de cotización, tendría derecho a recibir 29.065,98 euros en el año 2023, es decir, 2.076,14 al mes. Asimismo, el Ministerio de Seguridad Social ofrece un simulador en su página web para calcular con precisión la pensión en cada caso particular.
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¿Cuánto es lo máximo que puede cobrar un pensionista?
La pensión máxima de jubilación es el tope que la Seguridad Social pagará a los trabajadores durante su retiro. En estos momentos, la cuantía asciende hasta los 42.829,29 euros anuales, que divididos en 14 pagas —una por cada mes y dos pagas extra— suponen una asignación mensual de 3.059,23 euros. Los subsidios, por norma general, no pueden superar este límite, pero existen excepciones. Los ciudadanos que retrasan voluntariamente la edad de su jubilación, por ejemplo, tienen derecho a una prestación más alta cuando abandonan el mercado laboral.
La Seguridad Social premia con una pensión más alta a las personas que optan por la jubilación demorada. El aumento, no obstante, depende de las cantidades por las que se cotice y de los meses que se prorrogue la vida laboral. Los trabajadores, además, pueden escoger la forma en la que prefieren recibir este complemento en su prestación —un único pago con todo lo generado o una asignación más reducida con un plus mensual en la pensión— .
Además, los pensionistas que tienen derecho al complemento para la brecha de género también reciben un desembolso por encima de lo normal. Los trabajadores con hijos que no pudieron cotizar o han visto su carrera truncada por el cuidado de los menores tienen derecho a una partida adicional que se puede sumar a la pensión máxima. Este complemento supone una subida de entre 424,4 y 1.696,8 euros más cada año, todo ello en función del número de hijos. La cantidad, no obstante, puede sufrir modificaciones a lo largo del año.