Los pensionistas que han abandonado el mercado laboral después del 4 de febrero de 2021 están de enhorabuena. La Seguridad Social tiene a su disposición un complemento para tratar de reducir la brecha de género, dotado con hasta 33,2 euros al mes por hijo. Esta partida nace con el objetivo de reparar el perjuicio que han podido sufrir las mujeres a lo largo de su carrera profesional, sobre todo por asumir un rol principal en el cuidado de los niños, un cometido que las pudo haber perjudicado en el cómputo final de los subsidios.
Las pensiones contributivas han subido un 3,8% con el cambio de año. Las nuevas cuantías llegarán al bolsillo de los beneficiarios a partir de enero y entre las principales novedades destaca el fuerte impulso que van a sufrir las pensiones de viudedad con cargas familiares. Las prestaciones no contributivas han subido un 6,9%, mientras que las mínimas han crecido entre un 5% y un 7%. La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, ha querido agradecer el trabajo de los agentes sociales que han participado en la reforma y la disposición de los grupos políticos que “supieron estar a la altura”.
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La pensión media de jubilación —la más numerosa— ha subido 52 euros mensuales, mientras que la pensión máxima ha tocado techo al subir desde los 3.058 euros hasta los 3.174 euros al mes. El sueño de casi cualquier trabajador es disfrutar de este subsidio, aunque no todos reúnen los requisitos para hacerlo y solo los que han cotizado por la base mínima durante los últimos 25 años de vida laboral tienen derecho a solicitarlo. En cualquier caso, los pensionistas que hayan sido padres pueden disfrutar de un plus de hasta 33,2 euros al mes por hijo. ¿Cómo funciona este complemento?
¿Qué es el complemento por brecha de género?
Hace un par de años, la Seguridad Social puso en marcha un complemento para la reducción de la brecha de género dotado con hasta 33,2 euros al mes por hijo. El objetivo de este plus no es otro que reparar el perjuicio que hayan podido sufrir las mujeres a lo largo de su carrera profesional, generalmente por asumir un rol principal en el cuidado de los menores. El año pasado, un total de 661.981 pensionistas han disfrutado de esta asignación, que cambia en función del número de hijos. Los jubilados no son los únicos que tienen derecho a este subsidio. Los beneficiarios de las pensiones de viudedad o incapacidad permanente también pueden aprovechar para reclamarlo, siempre que la concesión de su subsidio se haya producido después del 4 de febrero de 2021.
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El complemento para la reducción de la brecha de género es incompatible con la percepción de la misma retribución por parte del otro progenitor, es decir, solo uno de ellos puede recibirlo —normalmente, quien recibe la pensión más baja—. El importe exacto por hijo es de 33,2 euros mensuales y se puede aplicar hasta un máximo de cuatro veces. Lo más habitual, no obstante, es que los pensionistas que reclaman este plus tengan dos hijos. En estos casos, la pensión se incrementa 66,4 euros cada mes, lo que suma un total de 929,6 euros anuales —repartidos en 14 pagas—. La Seguridad Social calcula que 312.261 beneficiarios estaban en este grupo, que es sin duda el más numeroso.