Si bien es cierto que, con la llegada de un nuevo Gobierno, los cambios en las grandes empresas públicas son habituales, también lo es que, en esta legislatura, Pedro Sánchez se ha dado más prisa que en otras ocasiones para situar a personas afines al PSOE en puestos ejecutivos de grandes empresas del Estado. Así, en menos de un mes, el líder socialista ha colocado al frente de entidades públicas, como Paradores, Correos o Hispasat a gente de su círculo, desde exministros como Raquel Sánchez o Pedro Duque a otros nombre menos conocidos. Este “premio” a su núcleo no es nada desdeñable, ya que la remuneración de estos nuevos cargos asciende hasta los 200.000 euros.
Uno de los casos más controvertidos es el de Correos. La entidad pública de envíos, hasta ahora presidida por Juan Manuel Serrano -quien fuera ex jefe de gabinete de Pedro Sánchez-, ha estado en el foco de la polémica por la gestión del socialista durante los últimos años. Entre 2018 y 2022, Correos ha acumulado unas pérdidas operativas cercanas a los 1.000 millones de euros, esquivando solo los números rojos en 2019. Unos ‘malos’ resultados que le valieron a Serrano para negar la subida salarial de los trabajadores de Correos, pero que no le impidieron el cobro del bonus de 40.000 euros para él y su cúpula directiva por los “buenos resultados”, tal y como apuntaban los sindicatos.
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Sin embargo, el pasado 27 de diciembre, el nuevo Ejecutivo nombró presidente de Correos a Pedro Saura, hombre de confianza de Sánchez y anterior portavoz de Economía del PSOE en el Congreso de los Diputados. En este caso, el sueldo de Saura no variará mucho, ya que el salario de 199.000 euros que se cobra como presidente de Correos es bastante similar a lo que él percibía como responsable de Paradores, cargo que ocupó hasta diciembre del pasado año. Sin embargo, el Gobierno también se ha asegurado de que Juan Manuel Serrano no se quede sin ocupación: el hasta ahora presidente de Correos ha sido recolocado como director general de la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre (Seitt), la empresa que gestiona las autopistas del Estado.
Tras el movimiento de piezas de Saura a Correos, la presidencia de Paradores se quedaba vacía. Pero poco tardó en ocuparse. Raquel Sánchez, la que fuese ministra de Transportes durante dos años bastante movidos -marcados por el alza del precio de los carburantes y las protestas de los camioneros- se quedaba fuera del nuevo Ejecutivo conformado tras las elecciones del 23J. A cambio, el presidente del Gobierno le otorgaba una de las sillas más ansiadas, la de Paradores, con un sueldo fijo de más de 150.000 euros que con los variables supera los 180.000 euros.
En este apartado de los ministros también se incluye a Pedro Duque, el astronauta y exministro de Ciencia, que ocupará la presidencia de Hispasat. Su sueldo, como máximo responsable del operador de satélites y proveedor de servicios satelitales participado por el Estado ascenderá a 200.000 euros -cifra que no se conoce con exactitud, ya que durante el mandato de su antecesor y ahora ministro de Industria, Jordi Hereu, nunca fue revelada-, por lo que percibirá más del doble de lo que cobraba como ministro.
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Otro de los bastiones ocupados por socialistas es el Hipódromo de la Zarzuela. El sillón de esta empresa estaba ocupado por Maritcha Ruiz Mateos, la ex jefa de prensa del PSOE, que abandonaba el mundo de la comunicación para ponerse al frente de esta entidad pública, hasta que el pasado mes de diciembre, el nuevo Ejecutivo nombraba a Ernesto Gasco -hasta ese momento comisionado contra la pobreza infantil- nuevo presidente del Hipódromo. Sánchez decidió suprimir el departamento del Alto Comisionado para dar más competencias al nuevo Ministerio de Infancia y Juventud dentro de los acuerdos de coalición, lo que provocó la despedida de Gasco. Sin embargo, el hombre del PSOE vasco no se va con las manos vacías: su nuevo cargo al frente del Hipódromo le reportará un salario de 138.000 euros al mes.
Otros nombres menos conocidos
En este reparto de empresas también hay nombre menos conocidos. Es el caso de Francisco Blanco, efímero secretario general del Ministerio de Industria y responsable de buena parte de la gestión de fondos europeos, y que ahora pasará a ser presidente de Sepides. En esta misma línea, el consejo de administración de Hunosa, la empresa pública minera, ha nombrado a Enrique Fernández presidente de la compañía a propuesta del Gobierno. Fernández, senador desde 2023 y portavoz en la Comisión de Industria y Turismo de la Cámara Alta, percibirá un salario 161.000 euros.
También en diciembre de este mismo año, el Gobierno situó al periodista Miguel Ángel Oliver como presidente de la agencia EFE, nombramiento que contó con el voto en contra de PP y Vox. Oliver, que fue secretario de Estado de Comunicación en el Gobierno de Sánchez hace menos de tres años y también formó parte de las listas del PSOE a la Asamblea de Madrid, percibirá un salario de 289.000 euros como máximo responsable de la agencia pública de noticias. De esta forma, en un mes, casi una decena de socialistas se suman a la larga lista de nombres propios como Maurici Lucena (Aena), José Luis Navarro (Enresa), Raúl Blanco (Renfe), entre muchos otros.