Un minúsculo habitáculo lleno de humedades y basura. Así era el zulo descubierto por la Guardia Civil en Villalbilla (Madrid) en el que un hombre de 50 años violaba presuntamente a su pareja, a quien también secuestró durante varias horas tras atarla de pies y manos con unas bridas. El agresor ha sido detenido acusado de los delitos de agresión sexual, detención ilegal, lesiones, malos tratos físicos, psicológicos y contra la integridad moral, todo en el ámbito de la violencia de género.
El maltrato por parte del arrestado era tal que días antes de la intervención de la Guardia Civil la mujer sufrió un aborto que, según un médico forense, podría ser compatible con los golpes recibidos por la víctima, según ha informado este jueves la Dirección General de la Guardia Civil.
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La investigación se inició el pasado viernes a raíz de una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil en Villalbilla (Madrid). La mujer manifestó haber sido retenida con bridas en una finca, lugar donde también, según su testimonio, había sido agredida sexual y físicamente por su compañero sentimental. La denunciante presentaba heridas y marcas en diferentes partes de su cuerpo.
Había estado varias horas atada de pies y manos en un zulo de espacio muy reducido y en condiciones de extrema insalubridad. Afortunadamente, pudo acabar cortando las bridas y escapó para pedir ayuda. Ante la gravedad de los hechos, especialistas en Policía Judicial se desplazaron hasta el hospital donde ingresó la mujer y corroboraron su versión. Los agentes descubrieron además que, días antes, la víctima había sufrido un aborto, que según el médico forense podía ser compatible con los golpes recibidos.
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Armas blancas y una escopeta de aire comprimido
Dado el alto grado de violencia empleado por el presunto autor, el mismo viernes los guardias civiles solicitaron al juzgado competente la entrada en la finca donde supuestamente habían sucedido los hechos. Esa tarde pudieron acceder con la orden judicial correspondiente.
En el registro localizaron -en el suelo de una de las habitaciones- un acceso a un pequeño habitáculo soterrado con escaleras que coincidía con la descripción facilitada por la víctima. Los agentes encontraron numerosas bridas, armas blancas y una escopeta de aire comprimido. Era un entorno totalmente insalubre, con mucha suciedad acumulada y abarrotada de objetos y basura.
El hombre de 50 años de edad contaba con numerosos antecedentes y fue detenido por la Guardia Civil. Tras ser puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Alcalá de Henares, el juez decretó su ingreso en prisión.