El 20% de las personas sin hogar es menor de 29 años, según el Instituto de Juventud

Dos de cada diez personas sin hogar en España que recurren a servicios asistenciales son jóvenes menores de 29 años. Este es el dato que ha presentado el Instituto de Juventud (Injuve) este jueves 1 de febrero. La cifra de jóvenes sin hogar ha aumentado de 4.000 a 6.000 en los últimos 12 años.

Injuve ha ofrecido estos datos durante la presentación de la revista Estudios de Juventud 127 titulada “Exclusión residencial entre las personas jóvenes: desafíos y propuestas para una sociedad” en la que han participado las asociaciones Hogar Sí, Provivienda y Solidarios.

Según han explicado en la presentanción, el 57% de los jóvenes que se quedan en la calle se debe a que vienen de un país extranjero sin recursos suficientes. De hecho, la última encuesta a las personas sin hogar elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) estableció que más del 21,1% personas de edades comprendidas entre los 18 y los 29 años no tenían un lugar donde vivir, y es en la población extranjera sin hogar donde se observa mayor peso de las edades más jóvenes.

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En la presentación han explicado que el 11% de los jóvenes procede de centros de menores y al cumplir la mayoría de edad tiene que abandonarlo. Además, el 18% se queda sin hogar tras sufrir violencia, el 9% ha perdido su trabajo y el 7% ha sido desahuciado de su casa, por lo que, según la asociación Hogar sí, existe no ya “un problema de encontrar vivienda, sino de mantenerse en ella”.

La asociación Provivienda ha hecho hincapié en las dificultades económicas que presentan los jóvenes para acceder a un hogar, pues destinan más del 40% de su salario a pagarlo y, según el Consejo de Juventud de España, solo un 16% de los jóvenes puede emanciparse.

De hecho, el último informe del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud explica que más de siete millones de jóvenes de entre 16 y 29 años que viven en España sufren un problema estructural de vivienda que afecta al país. Los escasos salarios, que de media alcanzan los 1.005 euros netos al mes, hacen que a los jóvenes les sea muy complicado comprar, alquilar o incluso compartir un piso.

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Provivienda ha añadido que las “políticas de vivienda no están adaptadas a la realidad que experimentan los jóvenes”. Existen iniciativas como la del Bono Alquiler Joven que aprobó el Gobierno y que pretende mejorar el acceso a la vivienda a las personas entre 18 y 35 años. La asociación ha explicado que esta exige tener una fuente regular de ingresos, por lo que “no llega a los jóvenes más vulnerables, que no están dados de alta en la Seguridad Social.”.

Además, como las ayudas se tramitan por el orden de llegada de las solicitudes y no se valora la diferencia de ingresos, “pueden quedar fuera jóvenes con muy bajos ingresos por el hecho de presentarla más tarde que otros”.

En la rueda de prensa, Hogar Sí, ha asegurado que vivir en la calle genera patologías físicas también en los jóvenes, así como problemas de salud mental. En la encuesta que elaboró el INE en 2022, un 7% de las personas en situación de sinhogarismo entre 18 y 29 años tienen diagnosticado algún trastorno mental. En este caso, un 27 % de las personas jóvenes en situación de sinhogarismo refiere tener un cuadro depresivo activo.

* Con información elaborada por la Agencia EFE