Paz Esteban, directora del Centro Nacional de Inteligencia entre 2020 y 2022, se ha escudado en el secreto profesional ante el juez para evitar hablar sobre el presunto espionaje a través del programa Pegasus al presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, entre 2019 y 2020, cuando era vicepresidente del Govern. La exdirectora se ha escudado en que afecta a información protegida por secretos oficiales, como informa EFE.
El pasado viernes, Blanco compareció ante un juez en una videoconferencia desde los juzgados de Madrid. Esteban se encontraba con dos letrados de la Abogacía del Estado, a los que se sumaban otros dos que siguieron la comparecencia en Barcelona.
El 24 de julio de 2019, Paz Esteban pidió autorización para intervenir el móvil de Aragonès, no para espiar sus comunicaciones institucionales, sino por su supuesta condición de “coordinador en la clandestinidad de los CDR” (Comités de Defensa de la República), que lideraban las protestas callejeras sobre el procés. Esteban fue cesada en mayo de 2022, después de que en el mes de abril se hiciera público el espionaje con el programa Pegasus y reconociera que la agencia había espiado a 18 personas dentro del independentismo con autorización judicial.
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En dichas declaraciones, EFE ha revelado que Esteban no aportó “ni un solo dato” sobre el espionaje a Aragonès. Lo única información que se conoce por el momento es que la funcionara avaló el uso del programa Pegasus en el móvil del president.
A la primera pregunta del juez, Esteban se escudó en que no podía facilitar detalles sobre el ataque con Pegasus al teléfono de Aragonès “porque afectaba a información reservada protegida por la ley de secretos oficiales”. Tras esta respuesta, según explica EFE, ni el juez ni la defensa pudieron plantear ninguna cuestión.
“¿Saben lo que supone para mí no poder contar cosas que sé porque si las dijese sería un delito?”, contestó la ministra a los parlamentarios de ERC que le recriminaron que el CNI no había entregado al juez todo lo solicitado.
De acuerdo con la información no censurada en los autos del Tribunal Supremo, el CNI pidió al juez Pablo Lucas en 2019 autorización para espiar el móvil de Aragonès, cuando era vicepresidente del Govern con Quim Torra como president. No obstante, en los fragmentos visibles de los autos que el Gobierno envió al juez instructor no constan los supuestos indicios de la relación de Aragonès con los CDR que el CNI utilizó ante Supremo para convencerlo de que avalara el espionaje.
El día antes de la declaración de Esteban, la ministra de Defensa, Margarita Robles, recalcó que la actuación del CNI respecto a Aragonès se llevó a cabo con autorización judicial y precisó que los documentos desclasificados por el Consejo de Ministros eran “todo lo absolutamente esencial” para que la exdirectora de los servicios de inteligencia pudiera contestar a las preguntas que le plantearan.
* Con información de la Agencia EFE