Las nuevas tecnologías inundan las aulas de todas los cursos: ocho de cada diez alumnos españoles (82%) han utilizado herramientas de Inteligencia Artificial (IA) alguna vez. De hecho, un 58% las usa para realizar trabajos, un 56% para complementar contenidos de materias y un 50% para estudiar y preparar exámenes. Estos son algunos de los datos que se desgranan del informe El impacto de la IA en la educación en España, la quinta edición del estudio de Empantallados.com y GAD3 sobre uso de la tecnología en los hogares españoles.
Pero no solo los estudiantes utilizan esta herramienta, el informe también demuestra que tanto profesores (73%) como padres (69%) la utilizan. La mayoría ha usado chatbots como ChatGPT. De hecho, el 40% de los alumnos, el 31% de los padres y el 22% de los profesores, utilizan este programa como una fuente de información frecuente.
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El 60% de los alumnos confía en ChatGPT como fuente
Los profesores son los que menos fiabilidad depositan en esta herramienta como fuente de información, mientras que los alumnos los sitúan como la cuarta fuente de información en la que más confían (61%), solo por detrás de Google (88%), libros y revistas (78%), Blogs y páginas web especializadas (74%).
Preocupados por lo que hace la IA con los datos personales
La mayor parte de familias (83%) y profesores (90%) manifiestan preocupación por las políticas de privacidad y el uso de los datos personales por parte de las herramientas de IA. En la misma proporción señalan la necesidad de marcos legales actualizados que den seguridad al tratamiento de la información en estas aplicaciones. Sin embargo, este tema sólo preocupa a uno de cada dos menores entrevistados (48%).
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Para Luisa Alli, secretaria general del Instituto Hermes, una fundación dedicada a defender los derechos de los ciudadanos en el entorno digital, este es un punto en el que debemos detenernos como sociedad. “Su enorme capacidad y su invisibilidad abre muchos interrogantes. Para algunos de ellos ya tenemos respuestas, pero hay otros más complejos. En el caso de la IA generativa, estos van desde entender las fuentes de las que bebe, de quién pasa a ser propiedad el texto que damos a ChatGPT cuando preguntamos algo o qué sucede con esa información”. La experta, que ha participado en la presentación el informe, ha insistido en que “tenemos el precioso reto de desarrollar esta tecnología asegurando que protege los derechos básicos de la persona”.
La IA en las aulas: ¿avance o retroceso?
La llegada a las aulas de ChatGPT y de la IA ha sido irremediable. Sin embargo, no todos ven con malos ojos la llegada de estas herramientas. Los padres, a pesar de expresar su desconocimiento al respecto, le dan un voto de confianza, pero los profesores no se muestran tan flexibles. El 57% de los padres valora de forma positiva el impacto de la IA en la educación que reciben sus hijos y el 60% estaría a favor de incluir la IA en el currículo académico. Pero, por el contrario, solo el 39% de los docentes valora de forma positiva el impacto educativo de la IA, aunque el 56% ve necesario incluirla en el currículo.
En lo que familias y docentes (77% y 70%, respectivamente) coinciden es en señalan aspectos prácticos de las tareas escolares, como la búsqueda de nueva información y la capacidad de la IA de explicar contenidos trabajados en clase (67% de padres y 57% de profesores). Sin embargo, lo rechazan en el caso de realizar la tarea, el 53% de los padres y el 67% de los profesores no recomiendan esta nueva inteligencia para hacer trabajos y deberes, aunque cuatro de cada diez padres y madres (40%) reconocen haber utilizado alguna vez chatbots para ayudar a sus hijos con la tarea escolar para hacer en casa.