Invertir por dividendo en el IBEX puede dar a los pequeños accionistas una rentabilidad del 10%, el triple que las letras

Invertir en acciones de empresas que reparten altos dividendos es una buena estrategia para pequeños inversores que quieren asegurarse ingresos periódicos a largo plazo, ya sea en metálico o mediante un pago en acciones de la compañía. Incluso puede convertirse en la alternativa para los ahorradores en letras del Tesoro y en depósitos ante la caída de rentabilidad que se prevé para estos dos productos este año con la bajada de los tipos de interés.

Y más si se tiene en cuenta que las cotizadas españolas son cada vez más generosas repartiendo beneficios entre sus accionistas. El año pasado distribuyeron 30.293 millones de euros en dividendos, lo que supuso un 16,63% más que en 2022, según datos del Banco de España. Se trata de la mayor retribución en cuatro años, desde 2019 cuando alcanzaron los 31.705 millones de euros.

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Solo en diciembre, las empresas repartieron a sus accionistas 2.503 millones de euros, un 6,71% interanual más. Casi la mitad lo dio Telefónica, que a través de un dividendo de 0,15 euros distribuyó 862,5 millones de euros. Coca-Cola Europacific Partners, dio 537 millones de euros; ArcelorMittal, 187 millones; Sabadell, 163,2 millones, y Bankinter, 127 millones.

Estas cifras hacen que “invertir en empresas por su rentabilidad por dividendo sea recomendable para inversores que requieren una corriente periódica de flujos de efectivo en sus carteras y pueden asegurar esos flujos invirtiendo en acciones que paguen dividendos altos y estables”, señala Antonio Castelo, analistas de iBroker.

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Explica que la rentabilidad por dividendo suele compararse con la rentabilidad de la deuda pública, dado que los dividendos se asimilan a los cupones repartidos por los bonos y obligaciones del Estado, por lo que para los pequeños inversores y ahorradores “es una buena opción si invierten a largo plazo. Se aseguran una buena y estable rentabilidad vía dividendo”. Mucho más alta de la que ofrecen las letras del Tesoro, que en las últimas subastas de enero han dado unos intereses que oscilan entre el 3,29% y el 3,58%.

Para obtener la mayor remuneración hay que elegir muy bien las empresas en las que invertir y uno de los principales criterios de selección es que tengan una clara vocación de retribuir al accionista.

Normalmente las empresas que más dividendos reparten se caracterizan por ser sólidas, con calidad crediticia superior a la media, estabilidad en sus ingresos, elevada generación de flujo de caja y que “pueden repartir sus beneficios porque los generan”, indica Victoria Torre, responsable de Oferta Digital en Self Bank.

Además de fijarse en que ofrezcan una elevada rentabilidad por dividendo, el futuro accionista tiene que tener en cuenta que esas empresas tengan “buenas perspectivas de negocio, ya que el pago del dividendo se puede ver afectado por malos resultados o, incluso, puede disminuir proporcionalmente si cae el precio de la acción”, apunta Joaquín Robles, analista de XTB.

A su juicio, “no vale de nada recibir una gran suma de dividendos si el precio de las acciones cae, por eso es importante tener en cuenta todas las variables en el momento de comprar una acción. El inversor debe analizar si su comportamiento es estable y tiene buenas perspectivas para poder seguir cumpliendo con sus compromisos de pago”.

A la hora de elegir, el inversor español lo tiene fácil, ya que en nuestro mercado cotizan numerosas empresas que remuneran “muy bien” el dividendo, reconocen los analistas. La mayoría cotiza en el IBEX 35 y, en general, son “más sólidas” que las del Mercado Continuo, señala Castelo. Entre ellas destaca Enagás, que ofrece una rentabilidad por dividendo del 10% y, a su juicio, “quizá sea de las que mejor remunera y la más estable”.

Otras de sus preferidas son Banco Sabadell, con una rentabilidad por dividendo del 11%, y Telefónica, con un 8%. Mientras que entre los mejores valores del Mercado Continuo destaca Atresmedia, con un 10,8%, y Lar, con un 10,9%.

“Todas ellas han mantenido estables o crecientes sus dividendos en los últimos ejercicios y se prevé que lo puedan seguir haciendo, gracias a su posicionamiento y a la recurrencia de su negocio”, apunta el analista de iBroker.

También Enagás está entre las preferidas de Joaquín Robles, a las que suma BBVA, Mapfre, y ACS, ya que todas ellas están dando una remuneración al accionista por encima del 8%.

Diego Morín, analista de IG, propone valores fuera del IBEX, como JP Morgan, con una rentabilidad por dividendo del 8,89%, a la que “favorece la situación actual de los tipos de interés altos” y Enel, con un 6,39%, y cuyo plan estratégico “es positivo y tiene un crecimiento de su beneficio medio sobre el 6%”, indica.

Otra baza que juega a favor de los pequeños inversores españoles al invertir por dividendo es que España es uno de los países europeos que mayor rentabilidad ofrece a los accionistas, ya que “muchas compañías han aprovechado esta herramienta para fidelizar a los accionistas, que se sentían cómodos recibiendo un pago periódico de sus inversiones vía dividendos”, señala Robles.

También Castelo reconoce que, en general y en su conjunto, las cotizadas españolas son “bastante generosas” en el pago vía dividendo y a través de programas de recompra de acciones propias y su posterior amortización, “que mejoran todos los ratios por acción incluido el dividendo por acción”.

Esta fortaleza del IBEX 35 destaca cuando se compara con otros índices bursátiles europeos. La rentabilidad por dividendo promedio prevista para 2024 para los valores que cotizan en el selectivo español está en el entorno del 5%, mientras que en el caso del índice alemán Dax es del 3,4%, el del francés CAC 40, del 3,1%, y en el EuroStoxx 50, del 3,5%.

Este año se presenta muy positivo para los accionistas que opten invertir por dividendo. En enero, las empresas que han distribuido pagos entre sus accionistas son: Endesa, CIE Automotive, Redeia, Mistral, Getamp, Repsol, Faes Farma, Naturhouse Health, Inmobiliaria del Sur, Amadeus y Acerinox.

Además, hasta fin de mes lo harán Sacyr, que el próximo día 30, permitirá elegir a sus accionistas entre un dividendo de 0,062 euros por acción o un nuevo título por cada 50 actuales, e Iberdrola, que el día 31 abonará 0,202 euros para cada título a los inversores que opten por recibir el dividendo en efectivo. También permite a sus accionistas vender sus derechos de asignación en el mercado u obtener nuevas acciones liberadas del grupo de forma gratuita.

Con vistas a febrero, ACS entregará el día 6 un dividendo flexible en el que los accionistas podrán escoger entre recibir nuevos títulos de la compañía o un pago de 0,459 euros por acción. También Vidrala abonará 1,018 euros brutos por título el día 15 de febrero y repartirá en total más de 32,8 millones de euros a cuenta de los resultados del ejercicio de 2023.