La detención en Marbella de Karim Bouyakhrichan, el narcotraficante más buscado y peligroso de los Países Bajos, ha constatado la presencia en España de la Mocro Maffia, una de las organizaciones criminales más activas y poderosas en todo el mundo. Sus brazos se extienden por casi toda Europa, aunque también llegan al norte de África, de donde son originarios muchos de sus miembros, y América, donde mantienen lazos con los cárteles de la droga locales.
Sin embargo, es en los Países Bajos donde ostentan un mayor poder. La Mocro Maffia llegó incluso a amenazar a la princesa Amalia de Holanda, la heredera al trono neerlandés, lo que obligó a los servicios de seguridad de la Casa Real a reforzar de forma férrea su protección. Otro suceso impropio de uno de los países más avanzados en Europa es el asesinato del periodista de investigación Peter R. De Vries, también atribuido a integrantes de la organización.
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La Mocro Maffia se encargó de constatar su presencia en España a base de secuestros, asesinatos y vuelcos -robos- de droga a otros grupos criminales. En concreto, la Costa del Sol, antes de la detención de Karim Bouyakhrichan, ha sido testigo del terror sembrado por algunos capos del clan neerlandés. El último suceso sonado es, precisamente, el asesinato en un restaurante de Benahavís (Málaga) del hermano de Karim, Samir, considerado hasta su muerte el líder de la organización.
Según fuentes policiales, se cree que Samir fue asesinado por orden de Ridouan Taghi tras perderse un cargamento con una tonelada de cocaína. Los Bouyakhrichan, encabezados por Samir, y los Taghi, liderados por Ridouan, se disputaban el poder de la Mocro Maffia desde la Costa del Sol. La muerte de su hermano y la detención del supuesto cerebro del crimen en Dubái auparon al liderazgo de la Mocro Maffia a Karim, a quien la Policía seguía los pasos durante los últimos años por blanquear los beneficios de la organización invirtiendo en viviendas millonarias, algunas de ellas en el litoral malagueño.
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La “llave” de la puerta de la cocaína en Europa
El poder de la Mocro Maffia en Países Bajos es consecuencia directa de su casi total control sobre la entrada a Europa de cocaína y otras drogas llegados desde Latinoamérica. En concreto, fuentes policiales aseguran que esta organización tiene la “llave” de la principal puerta de la cocaína en el continente: el puerto de Amberes (Bélgica). Las aduanas belgas se incautaron en 2023 en ese puerto de un total de 116 toneladas de ese estupefaciente, una cifra de récord.
La ingente cantidad de beneficios que obtiene la Mocro Maffia y otros clanes del narcotráfico son blanqueados posteriormente por otras ramas de las organizaciones. La desarticulada por la Policía Nacional en la Costa del Sol y Melilla revela que la mafia neerlandesa había apostado por la inversión inmobiliaria. Los agentes pudieron bloquear hasta 172 viviendas por un valor aproximado de 50 millones de euros.